Esta historia comienza con una guerra entre dos adorables personajes que aparentan odiarse y en la intimidad se roban los besos descaradamente. Unas situaciones desde que comienzas a leer muy divertidas y entretenidas, Cassandra es una mujer de armas y tomar y Reggie pretende domarla a su estilo y lo que no imagina es que se ha encontrado con la horma de su zapato.

Tengo que resaltar los paisajes románticos y las costumbres de los fabulosos bailes de salón y el cortejo de los caballeros. Reggie para mi es el caballero perfecto, paciente y en lo más profundo de su ser tierno, aguanta con mucho ímpetud las travesuras de una Cassandra audaz e inquieta, al final el conjunto es perfecto y saben que están hechos el uno para el otro.

Resaltar a uno de sus personajes secundarios que para mí es primordial, a parte de los conquistadores que ayudan descaradamente a una muchacha que quita el sentido sólo con su sonrisa y sus trastadas, Marcus el mejor amigo de Reggie se implica hasta el final contribuyendo a una serie de pruebas para su amigo, lo volverá loco pero así logra que la magia que tanto evita su estirado amigo, la acoja en su corazón.

Para valorar esta historia he puntuado todo el contenido, la descripciones de las escenas, las personalidades de los personajes que se hacen entrañables en el momento que los vas conociendo, la escritora ha sabido captar mi atención desde el primer capítulo y el final es entretenido y corto. Una narración amena y muy sencilla que te deja un buen sabor de boca. Así que esta historia se merece un 5.

Solo puedo decir que prometía mucho pero que al final no ha llegado a lo que yo me esperaba, que era algo como presentaciones de pretendientes/as con defectos que él otro no acepta, o situaciones cómicas con estos pretendientes/as, o intentar destruir las citas con esos pretendientes/as, etc. No, nada de eso, ella solo le busca a él una mujer y él ni siquiera le presenta a ella nadie, el pretendiente se lo busca el propio hermano de ella.

En fin, me ha parecido un libro que podría haber llegado a más, pero no ha sido así. Como siempre, fiestas de la alta sociedad, fiestas campestres, pero nada profundo o eso es lo que me ha parecido a mí.

Eso si, la historia es divertida, tiene puntos cómicos (la declaración de él es muy cómica). Algunos diálogos son simpáticos, otros inteligentes, otros aburridos, pero que han requerido de una gran agilidad mental por mi parte ya que eran sumamente largos e interminables, no acababan nunca, e incluso algunos interlocutores hablaban durante 10 renglones. Hay poca descripción de la situación y de las escenas. De los pensamientos tampoco hay descripción porque con tanto diálogo….pues no hace falta.

Lo único bueno del libro son sus protagonistas: Reggie, Lord Berkley es un protagonista atípico, es simpático, divertido, enamoradizo, inseguro y dócil, todo lo contrario a nuestros protagonistas habituales. Debido a todo ello, no tiene mucha suerte con las mujeres (o eso piensa él) y por tanto, él y un amigo suyo, crean un rumor entorno a él de que es un calavera, que ha asistido a varios duelos y que tiene muchas amantes, en fin que es un infame. Cassie es una mujer de la clase alta, de 24 años, que trabaja, es decoradora de interiores, aunque no le hace falta, pero lo hace, y está buscando un marido o el amor de su vida, pero es muy exigente e independiente, ya que está buscando a un hombre sensible, cariñoso, tierno, dócil, etc, es decir todo lo que Reggie oculta que es. Por eso en el momento en que Reggie y Cassie se conocen chocan pero a la vez se sienten muy atraídos. Y entre tanta discusión dialéctica sobre el amor, las parejas y la perfección deciden hacer una apuesta y buscarse pareja mutuamente. Ella tiene que buscarle a él la Señorita Perfecta y él tiene que buscarle a ella a Lord Perfecto. (mientras, ellos se llaman mutuamente Lord Infame y Señorita Excéntrica).

En fin esto da a situaciones, como ya he dicho, divertidas, pero poco más.

Nota: 2,8 de 5