Elizabeth Boyle me encantó con los primeros tres libros que publicó en español, por eso se convirtió en una autora fija en mis listas de lectura, pero sin embargo con esta segunda serie me está decepcionando un poco, no es que sean malas historias, pero las encuentro simplemente pasables y entretenidas que es exactamente lo que me acaba de pasar con Seducida por un canalla.

En el anterior libro de la serie conocimos a río de jovencitas de un pueblo muy peculiar que dicen está maldito, por eso hay tantas solteras entre sus habitantes, una de ellas es la joven Dafne Dale, que pertenece al prolífico clan de los Dale que llevan siglos en permanente guerra con los Seldon, para desgracia de Dafne, una de sus dos mejores amigas, Tabitha, a parte de terminar con la maldición, va a casarse con el duque de dicho clan por lo que tendrá que enfrentarse al rechazo que le produce esa familia si quiere seguir viendo a su amiga.

Pero Dafne además cuenta con algunos secretos personales, como que se cartea con un caballero del que se ha ido enamorando y del que piensa será su marido ideal, durante un tiempo se mandan cartas hasta que ambos deciden encontrarse en el baile de compromiso de su amiga Tabitha y el duque de los Seldon, sin embargo termina encandilada y bailando con el hombre menos apropiado, Henry Seldon.

Henry es el tío del actual duque aunque ambos, junto su hermana gemela Hen, tienen la misma edad, se han criado juntos y juntos han tenido que soportar la mala fama de su familia que tanto el duque como su hermana ayudaron a reafirmar, sin embargo Henry es diferente a todos los Seldon, es calmado, responsable, sensato y nada dado a escándalos. Debido a una broma de mal gusto de su sobrino termina carteándose con una dama de la que cada vez se va sintiendo más cercano y encaprichado. Pero en el baile de compromiso termina loquito por quien menos se lo espera, una Dale.

Tanto Dafne como Henry tienen opiniones muy arraigadas de ambas familias, ambos tienen muchos prejuicios infundados por antepasados y unas reyertas que llevan siglos produciéndose, sin embargo el destino o las circunstancias hacen que no dejen de encontrarse y que la atracción que ambos sienten el uno por el otro sea cada vez más fuerte.

Gracias a las celebraciones de la boda tendrán mucho tiempo para conocerse a pesar de que ambos personajes rechazan por cabezonería, las buenas cosas que van descubriendo el uno del otro. Cuando Henry empieza a sospechar de quien es realmente la dama con la que se cartea, tendrá que demostrarle que el amor está por encima de las rencillas entre ambas familias.

Es una historia entretenida, sin grandes sucesos ni emociones, para pasar el rato, entretenido. con algunos momentos divertidos, sencilla y simple, no está mal pero me esperaba más de esta autora.

Bueno