- Romántica histórica
- Sellado por el destino
Sellado por el destino
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Detalles del libro
- Romántica histórica
Libro 1 de la Serie "Clanes Escoceses"
Se las conoce como las Tierras en Disputa, una amplia franja de terreno entre Escocia e Inglaterra que da albergue a forajidos y ladrones de ganado... y a traidores, pues los sentimientos nacionalistas escoceses y el expansionismo inglés chocan con violencia aquí y favorecen conjuras y alianzas de conveniencia.
William Scott posee un castillo justo en la línea fronteriza y parece que sus preferencias se dirigen hacia los ingleses, aunque una joven de madre gitana y padre escocés ha visto en las líneas de su mano honradez y bondad de corazón, y un carácter afable. Tamsin es hija de un noble escocés y de una gitana de gran belleza que murió al nacer ella. Ha vivido hasta los seis años la vida itinerante de un campamento gitano, en compañía de sus abuelos, y ahora su padre la reclama para que viva en el castillo y reciba instrucción. El día que inicia el viaje a su nuevo hogar, por el camino, ve a lo lejos a un joven de trece años, a caballo entre hombres armados, y sabe que el destino de algún modo los reunirá. Un presentimiento, casi una certeza.
William Scott es ese muchacho escoltado por los soldados. Su padre acaba de ser ahorcado y el conde Angus lo retendrá, junto al rey Jacobo, como rehén. Diecisiete años más tarde, William, "un hombre delgado y duro, sorprendentemente apuesto y de aguda inteligencia", recupera su castillo y se ve envuelto en una conjura. Y de esa misma traición, y de las desastrosas consecuencias que podría tener, tratará de apartar a Tamsin y a su padre, Archie Armstrong, presos en una mazmorra tras participar en una incursión nocturna.
Opiniones de los usuarios
Tamsin es una niña cuando su padre pasa a recogerla del campamento gitano en el que vive con sus abuelos maternos. Su madre murió, y ella es feliz con los abuelos. Es medio gitana y medio escocesa. Su padre, Archie Armstrong, se la lleva cuando ella cuenta seis años de edad, para criarla. Pero Tamsin es insegura, pues su mano izquierda es más equeña que la derecha, y los gitanos creen que trae mala suerte.
De camino a su casa, Archie y Tamsin ven de lejos a un grupo de hombres, que acompañan a un joven de trece años, como rehén de la corona, tras haber ajusticiado al padre del muchacho, de nombre William Scott. Lo que no saben William y Tamsin es que sus respectivos padres tenían la esperanza de verlos casados en el futuro.
Años más tarde (diecisiete), Tamsin y William se reencuentran en un ambiente nada bueno para la muchacha y su padre, pues han sido capturados tras haberles pillado robando caballos. William, que está en cieto modo encubierto para averiguar lo que se trama en contra de la reina María, de ocho meses de edad, evita que maten a Tamsin, y promete custodiarla durante dos semanas mientras Archie "ayuda" a su capturador, Musgrave, un inglés que pretende secuestrar a la pequeña reina y llevársela a Enrique, el rey inglés.
Ella escapa, poco después de irse con su padre y William. William decide buscarla, pero después de pasarse por su casa y de ver a la viuda de James Stuart. Ella sabe que, por accidente, ella y William se han casado por el ritual gitano. No quiere estar encerrada en una mazmorra, así que se refugia en el campamento de sus abuelos.
William termina llevándosela a su casa, no sin antes de ser informado de que están casados. A él le parece bien, pues necesita una esposa para evitar que el abuelo de su pequeña hija Katharine, de ocho meses de edad, se la lleve. Y Tamsin necesita un esposo para evitar que su abuelo la case con un gitano.
Así pues, ambos acuerdan un matrimonio de amistad, sin sexo.
Pero el roce hace el cariño... y el destino se interpondrá en sus planes.
Acabo de terminarlo y no he quedado muy contenta de la lectura, pues lo veo muy flojo y poco romántico. Tanto "destino" me ha puesto de los nervios. Hay pocas escenas que dejen entrever la química entre los protagonistas, y apenas se besan. Hay que esperar más de doscientas páginas para ver algo que se parezca a lo que vemos en la romántica. No hay química, y la historia es absurda. Una gran decepción, pero no debería haber esperado gran cosa, ya que la sinopsis no era muy prometedora. Los protagonistas me han parecido muy simplones, tanto como la propia historia. Tamsin me pareció muy cansina, y repetitiva con lo mismo: su mano. William parece que no tiene carácter.
Una pérdida de tiempo. No la recomiendo.
Nota: 1/5.
