Iris Richomond es vecina de los Randolph, después de unos años en un colegio para señoritas regresa a su rancho porque sus padres han muerto. Su madre era una mujer muy hermosa pero muy caprichosa y derrochadora y su padre le consentía casi todo por lo que lo único que hereda es un hato de ganado que no valdrá nada sino lo lleva hasta Wyoming y lo vende. Siempre se ha sentido atraída por Monty, ya de chiquilla le seguía y le idolatraba y ahora que se ha convertido en todo un hombre se siente todavía mas atraída por él.

Monty ha trabajado mucho planeando el viaje hasta Wyoming, serán un par de meses de camino y la logística no es tan fácil cuando se quiere llevan mas de 2500 reses de ganado y el tiempo no acompaña pero él está dispuesto a conseguirlo y llegar sin ningún contratiempo, quiere demostrarle a la familia y a George en especial que está sobradamente preparado. Su idea es llevar el hato de la familia hasta el rancho que George y Madison han construido en allí y luego él quiere montar su propio rancho, donde pueda hacer y deshacer a su antojo y si se equivoca, no tener que dar explicaciones a nadie.

La visión de Iris después de unos años le deja anonadado, es la mujer mas bella que ha visto nunca pero es caprichosa y se parece demasiado a su madre de la cual la familia Randolph no guarda buenos recuerdos. Se niega en rotundo a llevar él el rancho de Iris ya que no puede dirigir dos hatos pero se ofrece a buscarle un equipo que la ayuda. Iris está decidida a que sea Monty quien la lleve ya que lo único que tiene son esos animales, es lo único que le separa de la pobreza y no confía en nadie mas.

Emprender el camino, Monty viaja con Hen, Tyler, Salino y Zac y con una cuadrilla de confianza. Iris ha salido delante con el capataz de su padre, Frank y con unos poco hombres que quedaban en el rancho. Monty no sabe que ella va delante pero Iris está segura que se encontraran enseguida y la ayudará.
Ya no cuento mas porque casi toda la historia transcurre en ese camino, rodeados de hombres sucios y polvorientos, de mas de 3700 reses de ganado, de carromatos, de hogueras, de falta de agua y de mucho calor.
A mi me ha gustado la historia, las dificultades que pasan ,los problemas, el ambiente, todo. Monty ha sido todo un descubrimiento, un hombre gruñón y protestón pero con un corazón enorme , que se nos descubre como hombre con gran paciencia (con Iris lo necesita), cariñoso y protector y aunque en un principio no quiere saber nada de Iris, cuando acepta finalmente que la quiere no duda en luchar por ella.

Quizá la única pega que le pongo es Iris, se me ha hecho una protagonista caprichosa y sin mucho cerebro, que cambia constantemente de opinión, ahora quiero a Monty, ahora no, ahora quiero irme a Boston y vivir como una reina y poco depues quiere montar su propio rancho. En el transcurso del viaje va madurando y dándose cuenta de que no todas las ideas que su madre le inculcó son ciertas y al final parece que tiene los pies en la tierra pero el camino se me ha hecho pesado.

La aparición de los demás hermanos me ha gustado mucho, Hen con sus silencios, Tyler con su comida , Zac con el ímpetu de su primer viaje, vemos a Monty y a Fern un poco y me alegra ver como se han ido adaptando el uno al otro.

Ya estoy deseando leer la siguiente historia, la de Hen, la verdad es que junto a Jeff son los que mas me llaman la atención.

Le pongo un bueno.

Se trata del tercer libro de la serie Siete Novias del escritor Leigh Greenwood. Aquí tenemos la historia de Monty Randolph, el impulsivo gemelo de Hen.

Iris conocía a los Randolph desde que era una niña. Enamorada de Monty desde que tenía trece años, le seguía a todas partes importunándole allí donde fuera. Tras cuatro años en un internado en San Louis había regresado a casa para encontrar todo completamente diferente a como lo dejó. Pero, a quien encontró más cambiado, fue a Monty. Ahora la rehuía y era imposible hablar con él. Sin embargo, necesitaba más que nada su imprescindible ayuda si quería salvar las pocas posesiones que le quedaban. Sabía que Monty iba a llevar un hato de ganado de la familia hasta Wyoming y allí ella disponía de un fértil terreno donde rehacer su vida. Pero iba a ser extremadamente difícil demostrarle que estaba preparada para recorrer tres mil kilómetros de terreno inhóspito y peligroso. Monty, diez días después de ponerse en camino, no puede salir de su asombro cuando descubre a Iris y a sus reses precediéndoles en el trayecto. Pese al enfado inicial, la joven será salvada en multitud de ocasiones por él. Sobre todo, cuando empieza a sospechar que el capataz de la señorita Richmond está implicado en la desaparición de cientos de reses de la manada. La animosidad entre Monty y Frank Cain irá aumentando a medida que se acerquen a Wyoming. La llegada de Carlos, el hermanastro de Iris, y su inseparable amigo Joe, no hará sino empeorar la convivencia entre los hombres de ambos hatos. Una nueva imprudencia de Iris, en la que implica a los Randolph, dará lugar a nuevos problemas en el camino. Tras verse rechazada por Monty, Iris marchará a Dogde y de ahí al terreno que posee en Wyoming en un intento de olvidar lo que siente por el joven Randolph. Hasta allí la seguirá Monty irremediablemente enamorado de ella.

Iris es un libro que he vuelto a releer hace unos días con la intención de realizar la crítica. Como los anteriores me resulta ameno e interesante, aunque he de decir que a mí siempre me han gustado los westerns. A las que no les guste este género cinematográfico puede que les resulte aburrida la novela. Prácticamente todos los capítulos discurren entre vacas, terrenos inhóspitos, estampidas, hombres rudos y sucios y mucha falta de agua. Hasta hay indios hambrientos con los que tienen que negociar y una mujer, Betty Crane, atacada por los indios queya han acabado con la vida de su esposo. Pero con tantas situaciones de peligro, estampidas, persecuciones, traiciones…no he podido dejar de leer hasta el final.

Monty Randolph, a pesar de su arrogancia y su carácter impulsivo, destaca en su afán protector. No puede evitar estar cerca de Iris intentando protegerla de cualquier situación. Pero, le cuesta aceptar sus sentimientos hacia ella. Teme que sea como su madre, Helena. Capaz de intentar recurrir a cualquier arma de mujer con tal de salirse con la suya. Tiene miedo de no estar a la altura de lo que su familia, y sobre todo George esperan de él .A lo largo del libro se ve como trata de superar sus prejuicios y como se da cuenta de que el amor sí existe.

Iris Richmond ha sido siempre una niña mimada. Abierta y cándida había conseguido salvar siempre las defensas de Monty mientras era una adolescente. Pero ahora, convertida ya en mujer, no estaba dispuesta a dejar escapar a Monty. Acostumbrada a que nadie le replicara actúa de forma impulsiva desafiando continuamente la autoridad de Monty. No se da cuenta de que el joven debe anteponer sus responsabilidades a sus deseos. Los enfrentamientos entre ambos son continuos, sobre todo porque ella no es tan perfecta como Rose, la esposa de George.

Entre los secundarios tenemos a otros miembros de la familia Randolph. El callado y peligroso hermano gemelo Hen. El experto cocinero Tyler, que sigue en su afán de mejorar la alimentación de sus hermanos pese a no ser del todo comprendido. Zac, que siendo apenas un adolescente está empeñado en demostrar a su familia que con él se puede contar. Y la inestimable ayuda final del estirado Madison y de su esposa Fern.

Resumiendo, un libro entretenido, a pesar de ser el más flojo de la serie, que me ha hecho pasar un buen rato de lectura con una novela ambientada en el oeste americano de 1875. Eso sí, si no te gustan las vacas, las estampidas, el desierto…puede que la novela no te atraiga y te resulte aburrida. En este caso es mejor abstenerse.

La puntúo como buena.