Esta es una de esas reseñas que me cuesta horrores hacer. Por un lado por no poder ni deber soltar datos importantes y por otro, por saber expresar los tantos y diferentes sentimientos que ha despertado en mí y por lo tanto, las emociones que me ha trasmitido esta historia.

Conocí la pluma de Kate Danon gracias a la primera novela de esta serie Hermanos MacGregor, La Joya de Meggernie, y tras leer esta auténtica joya romántica, de imprescindible lectura para las amantes del género, me enamoré total e inmediatamente de la forma de escribir de Kate, y supe que desde ese momento no me perdería lo que ella escribiese, y menos aún sobre estos hermanos.

La serie MacGregor está compuesta por tres novelas; la primera ya mencionada La Joya de Meggernie, la segunda El secreto de Malcolm y la tercera El destino de Niall.

Insisto y subrayo esto antes de dar mi opinión porque es una serie que hay que leer el orden sí o sí. Para que lo entendáis y e intentando no hacer spoiler os diré que aunque cada novela tiene diferentes protagonistas e historias independientes, comparten un punto común en la trama que si no lo lees en orden no vas a entender nada. Así que hazme caso y si vas a leer estas absolutas maravillas hazlo en orden.

Una vez aclarado esto os que he quedado definitivamente fascinada con El destino de Niall.

Que novela tan sorprendente, intensa, emotiva y diferente. Que maravilla.

Tras leer las dos novelas anteriores esperaba la de Niall como agua en el desierto. Sabía que en sí la existencia de la novela ya en sí iba a resultar una sorpresa después de los acontecimientos conocidos anteriormente, pero aún así no llegaba a imaginar que la autora iba a ser capaz de hacerlo con tal maestría.

Hablar de Niall es soltar bombas en forma de spoilers a cada momento. Ya solo pronunciarlo lo es, así que solo os diré que hay que saborear su historia.

Es un personaje tan querido, tan vanagloriado, tan esperado... Que conocerlo ha sido un gustazo. Niall enamora con sus virtudes y aún más con sus defectos. Se le adora aún sin llegar a entender ciertas decisiones, y se le adora aún más por sus actos. Es un hombre que arranca suspiros por su vulnerabilidad y hace sentir ese pellizco en el pecho por su arrogancia. Es en definitiva el perfecto protagonista imperfecto que roba el corazón.

Pero no solo Niall es aquí el protagonista, por supuesto que no, tenemos a la adorable y valiente Rosslyn como compañera de aventuras y responsable de la reaparición de Niall a su vida anterior.

Ella es todo lo contrario a Niall. No tiene ninguna experiencia en la vida. Ha vivido encerrada sin más contacto que la persona que la cría y cuando ve un pequeño resquicio de lo que supone una vida llena de emoción y libertad no duda en luchar por ella.

Por lo que de la mano de ambos personajes viviremos una experiencia desgarradora, emotiva e intensa que hará palpitar el corazón fuertemente en más de una ocasión.

La trama de la novela cautiva desde el principio y la autora es capaz de crear una historia con coherencia, tarea bastante difícil, y mantener en todo momento la intriga con su hábil pluma y original ingenio, añadiendo unos giros inesperados y sorpresas, hasta el final.

Es digno de alabanza el trabajazo que ha tenido la autora al escribir esta historia. Los lectores de la serie y enamorados de estos particulares hermanos vimos como nuestras plegarias fueron escuchadas cuando vimos la publicación de la novela, pero entiendo que para la autora ha debido ser todo un reto y sinceramente hay que darle la enhorabuena por tan complicado trabajo y por supuesto las gracias por darnos el capricho.

Es una novela de la que cuesta desprenderse días después incluso de haberla terminado, pues a mí al menos ha conseguido hacerme temblar, reír, suspirar y soltar alguna que otra lágrima.

Creo sinceramente que es un broche de oro ideal para una serie extraordinaria de la que no podría elegir solo una de ellas. Sin duda son historias que merecerá la pena (y necesitaré) releer en algún momento.

La recomiendo encarecidamente, son joyas que se deben leer.