Este libro es la historia de Maggie, una chica de treinta y dos años, soltera y con ganas de conocer a alguien especial con quien casarse y tener una familia. Vive en un pueblo costero a dos horas de Boston. El pueblo es de mil cuatrocientos habitantes por lo que todos se conocen y todos hablan y cotillean de todos. Maggie es propietaria de la única cafetería del pueblo, allí se reúnen cada día gran parte de los habitantes por lo que siempre está enterada de todo lo que se rumorea en el pueblo. El problema es que muchas de las veces es ella misma la protagonista de los chismes que circulan. Lo último fue hace un año, cuando conoció a Tim. Se presentó un día a desayunar a la cafetería y Maggie se quedó prendada de él: con acento irlandés, atractivo, ojos azules, simpático... su hombre ideal. Sin embargo, pronto descubrió de la forma más vergonzosa y delante de todo el pueblo, que Tim era el nuevo párroco católico del pueblo. Un año después, se ha convertido en una mecenas de la iglesia, está apuntada a un montón de actividades en la iglesia y aunque ahora se ha convertido en una buena amiga del padre Tim, ella sigue enamorada de él y su corazón se dispara cada vez que le ve. Pero éste no es su único fracaso sentimental, desde el instituto estuvo saliendo con Skip, y cuando volvió de la universidad y ella pensaba que le pediría que se casaran, él apareció en el pueblo de la mano de otra chica, dando así por terminada la relación con Maggie y encima también delante de todo el pueblo.

Decidida a cambiar su actitud hacia el padre Tim, deja que su hermana e incluso el padre Tim le concierten varias citas a ciegas, a cual más desastrosa, hasta que un día por casualidad acaba cenando con Malone, un pescador del pueblo que aunque lo conoce de toda la vida nunca se había fijado en él por ser una persona huraña y de pocas palabras...

Bueno, este es a grandes trazos el argumento del libro. Se trata de una historia coral, donde son muchos los personajes que aparecen. Por supuesto la gran protagonista es Maggie y sus "aventuras y desventuras". Yo no creo que este libro sea al 100% romántico, diría más bien que está a medio camino entre lo romántico y lo chick lit.

Maggie es un encanto de persona, adora su pueblo y sus gentes, considera que está dando un servicio a la comunidad con su cafetería y por las tardes se dedica a cocinar dulces para la cafetería pero también cocina para repartir comida a los necesitados, colabora con la parroquia y siempre está dispuesta a hacer una buena obra. Lo que más desea en esta vida es encontrar a alguien que la quiera y la cuide, pero en ese aspecto ha tenido muy mala suerte.

La historia está narrada en primera persona por Maggie, y mientras iba leyendo cómo explicaba sus historias con los hombres me he emocionado, igual he reído que he llorado pensando en la mala suerte que tenía. Maggie es un personaje que le coges cariño, si fuera real sería una buena amiga. El libro no sólo se basa en las historias amorosas de Maggie, sino que trata también la vida del pueblo y de las personas que rodean a Maggie: Christy, su hermana gemela idéntica pero que la vida le sonríe y tiene el marido perfecto, la hija perfecta y la vida perfecta con la que sueña Maggie. Su hermano Jonah, un joven que ha decidido dedicarse a la pesca de la langosta y en lo que sus padres no están muy de acuerdo. Su madre que siempre que la ve lo primero que le pregunta es si ha conocido a alguien y le aguijonea la moral recordándole lo perfecta que es su hermana y que ella se quedará para vestir santos, su padre que es un "santo", el padre Tim tratando de concertarle citas, su amiga de copas Chantal.... En definitiva, todo un elenco de personajes que hacen de esta historia algo más humano, más real.

Especialmente mencionaré a Malone, un hombre con un pasado desagradable que se dedica a la pesca. Está divorciado, se rumorea en el pueblo que su mujer lo abandonó una noche y se fue a la otra punta del país, y tiene una hija. El carácter de Malone es muy extraño, es un personaje que casi no habla, los primeros encuentros con Maggie son básicamente monólogos de ella porque él sólo se digna a decir monosílabos. Eso ha hecho que al principio no me gustara demasiado para Maggie, pero a medida que va avanzado la historia vas viendo pequeños detalles por parte de Malone que consigue que al final del libro le aprecies tanto como a ella.

En resumen, me ha gustado, está bien escrito y describe muchos detalles y sentimientos, tiene puntos de reírte un montón pero también tiene momentos de llorar a lágrima tendida. Es lo primero que leo de esta autora y seguro que no será lo último.

Valoración: 3,5/5

Maggie Beaumont había demostrado a sus treinta y un años que no sabía elegir bien a los hombres. Algo que no podía pasar desapercibido en su pueblo, Gideon´Cove, con solo mil cuatrocientos siete vecinos, y siendo ella la propietaria de la cafetería Joe´s, la única del pueblo. En su afán por conseguir un marido, y los hijos que tanto ansiaba, no había podido evitar fijarse en un recién llegado a la localidad, y antes de conocer su profesión le había "confesado" a setenta y cinco vecinos que había conocido a un hombre especial, Tim O´Malloren. Algo que debería haber evitado, pues ya había sido la comidilla del pueblo cuando su novio de la adolescencia había llegado al pueblo del brazo de una hermosa mujer, hija de un magnate del petróleo.

Sin embargo, vista la nefasta capacidad que tiene ella para buscar marido, algunos familiares y vecinos de Gideon´Cove deciden buscarle esposo. Más de uno cree que Malone, un divorciado pescador de langostas puede ser el candidato especial para ella. Algo que a ella le cuesta aceptar pues sólo es capaz de ver en él a un hombre solitario, sombrío, taciturno y algo siniestro, pese a que ha salido en su ayuda en más de una ocasión.

Malone tiene sus motivos para ser tan reservado y callado. Con una infancia lamentable, y abandonado por una mujer que se marchó con su hija, siempre ha sido uno de los cotilleos del pueblo. Pase lo que pase, Malone es el culpable, algo que parece que los vecinos de Gideon´Cove están decididos a demostrar, pese a que en más de una ocasión Maggie podría acallar los rumores. Pero Maggie no está dispuesta a seguir aceptando en su cama a un hombre que no sólo no quiere revelar su propio nombre sino que podría ser responsable de la paternidad del hijo de su amiga.

Al principio me costó acostumbrarme a leer la novela en primera persona, sobre todo por su manera de alternar presente y pasado, pero la personalidad de Maggie, así como sus aventuras y desventuras amorosas, me hicieron sentirme enseguida atraída por ella, por lo que al final tuve que leer la novela de un tirón. Es una mujer alegre volcada siempre en el pueblo y sus vecinos que solo aspira a conseguir el premio al Mejor Desayuno del condado, y un marido y unos hijos a los que amar y con los que compartir su vida. Su bar es el centro de reunión de un variopinto y numeroso grupo de personas que cotillean sobre cualquier acontecimiento nuevo que surja en Gideon´Cove. Maggie tiene una hermana gemela que se ha convertido en la mujer perfecta, algo que no deja de reprocharle su madre al no ser como Christy.

No había leído nada de esta escritora pero creo que le daré una oportunidad pues me lo he pasado muy bien leyendo la novela, aunque también he tenido que derramar alguna que otra lagrimita.

La valoro como buena.

Tirando del anzuelo es el primer libro de Kristan Higgins que me leo y ha sido un buen comienzo con una autora que hasta hace poco no me interesaba mucho leer, pero que tendré en cuenta a partir de ahora.

La historia me ha sorprendido para bien porque no era lo que me esperaba, está contada en primera persona por Maggie y aunque parece una trama bastante manida tiene toques originales que la hacen diferente de tantas novelas de este estilo.

Maggie regente la única cafetería del pueblo donde nació y se crio, el Joe´s m un establecimiento que abrió su abuelo y que luego pasó a manos de Maggie haciendo de él un establecimiento acogedor donde todo el pueblo puede reunirse para tomar un desayuno decente.

Maggie tiene una hermana gemela, Christen, y un hermano más pequeño, Jonah, unos padres que llevan treinta y tres años casados y un perro fantástico de trece años al que adora, pero Maggie quiere más, a sus treinta y dos años quiere lo que tiene su hermana, un marido que la adora, hijos que criar y cuidar , pero la vida de amorosa de Maggie es complicada.

Todo empieza cuando siendo una jovencita su casi prometido la deja delante de todo el pueblo por otra chica , pasan los años y una serie de relaciones infructuosas la llevan a enamorarse o encapricharse de un hombre atractivo, que comparte sus mismos gustos y con el que puede hablar de todo, lo malo es que es el nuevo cura de su parroquia. La vida sentimental de Maggie siempre es una fuente de entretenimiento para un pueblo pequeño donde todo se sabe y donde el cotilleo es la actividad favorita.

Al principio Maggie puede parecer un personaje un poco patético, o esa es la impresión que a mi medio al comenzar la historia, obsesionada por casarse y formar una familia deja que todo el pueblo se entere de todo lo que le pasa y se rían de ella, ayuda a todo el mundo y colabora en muchas actividades, les paga más a sus empleados de lo que cobra ella y deja que su madre la critique cada vez que la ve por no casarse y tener hijos, acude a citas a ciegas que son un desastre y está encaprichada de un cura, pero poco a poco Maggie te va conquistando, sobre todo cuando por una serie de acontecimientos termina intimando con Malone, uno de los pescadores de langostas que es un hombre taciturno y osco que apenas habla y mucho menos sonríe.

El libro que empieza más o menos , se va animando mucho poco a poco, me gusta Maggie y Malone, son dos personas que en principio no juntarías nunca y de hecho Maggie a parte de tenerle un poco de miedo, nunca se había fijado en él como hombre, pero entre los dos hay una atracción que dejará a Maggie un poco descolocada ya que es un hombre que no habla ni cuenta cosas sobre su vida, pero que dice mucho con su intensa mirada y sus gestos. Eso si, los dos son testarudos y propensos a los malos entendidos.

Resumiendo, me ha gustado, lo he disfrutado y me pareció un estilo bastante original y diferente.

Bueno