Grayson, cabeza de familia del alocado clan Boscastle, bajo una situación poco común en una boda, donde la novia se queda sola delante del altar, decide que es tiempo de comenzar a hacer algo bien y tratar de guiar a su descarriado rebaño hacia el camino de la decencia y el buen juicio.

Jane, saboteadora de su propia boda en total secreto y conspiración con el que era su pretendiente, decide dejarlo marchar todo sea en nombre del amor, por lo que el día de su boda, en contra de todas las tradiciones, es ella la que se encuentra para ante el altar esperando al desaparecido novio. Fue cuando vio el primo de su "novio", el marqués Grayson Boscastle, y haciendo honor a los cotilleos, calló bajo el embrujo de esos ojos azules.

Desde el día en que se vieron por primera vez, su destino estuvo sellado, aunque claro, ellos aun no lo sabían. Greyson, actuando acorde a su nuevo estilo de vida, con el que se proponía dar el ejemplo a sus hermanos que iban camino a la perdición, decidió hacer de "pretendiente" de la señorita Jane, para recuperar su puesto como "mujer deseada" y "buen partido" antes los ojos de los solteros de la sociedad londinense.

Cuando Jane se entera de lo que propone hacer el marqués, entra en pánico total, temiendo que se descubra su complot con Nigel (su prometido hasta ese entonces). Durante el transcurso de la historia se va enamorando de Greyson,quien hace un despliegue de encantos para darle más realismo a su papel. Pero Greyson no es están inmune a Jane como se creía, resulta que se encuentra atraído por el encanto y la inteligencia de Jane.

Cuando Greyson se entera (ayudado por uno de sus hermanos) de que Jane estuvo planeando el fracaso de su boda todo el tiempo. No es capaz de creer que la señorita Jane, tan inocente que se veía, haya sido lo suficientemente valiente como para arriesgar su lugar en la sociedad para ayudar a su soso primo ( que según la investigación realizada por el hermano de Greyson, se escapó para casarse con la institutriz de su infancia). Aunque ya había decidido casarse con Jane y atarla a él, le tiende una trampa a modo de venganza por haberlo engañado.

La hace creer que su padre aceptó la proposición de que ella fuera su amante, cuando en realidad había aceptado su proposición para convertirla en su esposa; y la lleva a una de sus muchas propiedades en la playa, donde le da un intenso entrenamiento en los deportes de alcoba.

Como toda historia de amor, bien está lo que bien acaba. Definitivamente es mi libro preferido de esta serie. Lleno de amor, de apoyo familiar, pasión y mucho humor. Durante toda la historia intervienen los hermanos de Greyson, que demostraron ser tan pícaros como lo era el propio Greyson, donde se puede apreciar la unión familiar y los fuertes lazos afectivos que existen entre estos, también aportan su poco de humor a la historia, ya que siempre embroman a Greyson como soltero jurado que era. Toda rebosante de una magnífica descripción y uso de la narrativa por parte de la autora, con diálogos que cautivan al lector, y lo hacen entrar de lleno en la historia, es una novela que nos hace pasar un rato más que divertido.

Es el día de la boda de la dulce y encantadora Jane y ella se encuentra sola ante el altar.

El novio no aparece y ya todos empiezan a suponer que no aparecerá y que la ha dejado plantada. Todos creen que esta afligida y hecha polvo, incluido el mismísimo marques Sedgecroft, primo de Nigel, el que fuera a ser su esposo.

Jane estaba totalmente tranquila y viendo como poco a poco iba saliendo su plan de frustrar su propia boda. Pues lo cierto era que ella y Nigel no se amaban, se querían, pero como si fueran hermanos. Nigel estaba enamorado de una mujer, su institutriz y con la que deseaba desesperadamente casarse y ella deseaba poder elegir libremente a su marido, y que esta vez fuera por amor.

El plan estaba saliendo perfectamente hasta que el reconocido liberto y primo de Nigel, el Greyson el marques de Sedgecroft aparece en escena para proponerle un plan. Como se siente tan culpable de la manera tan lamentable del comportamiento de su primo, el como cabeza de familia intentara solucionarlo de la mejor manera que cree él. Que no es otra que salir con ella en sociedad y cortejarla delante de todo el mundo, para que la sociedad se de cuenta que Jane realmente no esta destrozada por el hecho de que la dejaran ante el altar, si n que es una jovencita muy deseable.

A Greyson le había parecido su plan una brillante idea, hasta que se empieza a dar cuenta que ya no esta con Jane por el plan inicial, si no por el simplemente hecho de que le encanta estar en su compañía, su risa, su boca, toda ella es tremendamente deliciosa, hecho por el cual él no puede resistir la tentación de llegar cada vez mas lejos sus juegos de seducción.

Hay, pero que ocurrirá cundo el renombrado marques de entere de que jane le ha estado mintiendo todo este tiempo, que ella fue la encargada de frustrar su propia boda, de que todo lo que el creía que era ella, en realidad es una fachada.

Una novela entretenida y muy divertida en la fase final de la novela. Con una jane que tiene las cosas muy claras, hasta que conoce al apuesto marques y que la deja completamente desequilibrada.

La novela se lee de tirón y aunque no sea una gran maravilla, si que te hace pasar un buen rato.

Primero me leí mi amado lord y estaba deseando leer este libro, pues los personajes salen en el otro.

La historia no me ha defraudado, es divertida y la relación entre ellos es pasional e intensa. Ahora estoy deseando leer la del otro hermano.