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Desde que comencé a leer novela romántica histórica, concretamente la época de Regencia y Victoriana, han sido muchas las veces que me han asaltado dudas conforme se mencionaba títulos nobiliarios en ellos.
Muchos de nuestros personajes son pertenecientes a la alta sociedad y nobleza, y no sé vosotros pero yo, incluso a día de hoy después de muchos años leyendo, me siguen mareando un poco el saber quién está por encima de quién o a cómo se le debe tratar.
Por eso se me ha ocurrido investigar y estudiar un poco esto, con la intención de saber qué son y que significa y/o conlleva dicho título.
El nacimiento de los títulos nobiliarios se remonta a la Edad Media; los títulos se crearon para para mantener el orden entre los miembros del lugar durante el Feudalismo, mantener cierto orden y organizar la posición de las tierras y la relación entre el vasallaje. Los títulos eran concedidos por el Rey y los agraciados solían ser los caballeros de la corte que demostraban ciertas acciones destacables en las batallas.
Desde la antigüedad el título nobiliario es un privilegio legal concedido para distinguir a los miembros de la nobleza.
El orden de rango de mayor a menor es siguiente:
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Los de mayor rango en la nobleza es el papel del Rey o Reina, junto con los príncipes y los infantes.
A continuación, existió durante un limitado tiempo, el título de Archiduque/sa, implica un rango mayor sobre el príncipe y duque, pero por debajo del Rey o emperador. Solo fue utilizado en el reino de Austria.
El siguiente en el rango sería el Duque: este es uno de los títulos nobiliarios con los que los monarcas mostraban su gratitud a otras personas. Es el título de mayor rango y se le suelen conceder a los hijos no herederos de la realeza. El trato que recibe es de Excelencia o Su Gracia, y para nombrarlo se usaría antes de su nombre el Lord, tras el cual se pronuncia el título. A sus hijos se les trata de Lord o Lady, y se añade el nombre más no el apellido.
A continuación, tenemos a los Marqueses; este título nobiliario lo concedían los monarcas por el honor o dignidad a ciertas personas y linajes a lo largo de la historia. Su posición en la jerarquía nobiliaria es superior a la de Conde e inmediatamente inferior a la de Duque. Su trato es de Lord o Lady seguido de su apellido más el título. Sus hijos también son tratados como lord o lady. A el heredero se les da el trato generalmente se Vizconde, aunque en alguna ocasión según las circunstancias también se les pueda otorgan como Conde.
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Los títulos de Condes de otorgaban por el reconocimiento por una determinada causa, este tratamiento solía ir acompañado de recibir tierras o exenciones de impuestos entre otras gracias. Su trato es de Lord o Lady seguido de su apellido o título. Sus hijos reciben el trato de El o La Honorable seguido del apellido o el nombre dependiendo si hay más de uno en el momento que se dirigen a ellos. El heredero habitualmente utiliza el segundo título del condado que va a heredar.
El título de Vizconde es inmediatamente inferior al de Conde, y el periodo medieval ejercía funciones como sustituto en su territorio pero, a partir del siglo XIX, este título pasa a ser simplemente honorífico. Su trato es de Lord o Lady seguido de su apellido o título. Sus hijos son tratados como El o La Honorable más su apellido o nombre. Su heredero es tratado como Barón y también recibe el trato como El Honorable seguido de su apellido.
Por último tenemos a los Barones, este título es el de más bajo rango aunque con ciertos privilegios. Se le trata como Lord o Lady y su heredero recibe el trato de Honorable.
Los títulos son de carácter hereditario. La sucesión recae en el primogénito del anterior poseedor y su uso se extiende a los consortes legítimos a cónyuges viudos mientras no contraigan nuevas nupcias.
Actualmente la cosa a cambiado mucho, aunque aún existen algunos de estos títulos ya no van ligados a ningún tipo de privilegios, más que el honor de llevar un apellido ligado a la historia.
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