Detalle de la opinión
3.0 1 0.5Es una historia de esperanza
Valoración
3.0
El veneno del nazismo cada vez se va expandiendo más y más rápido, hasta llegar a Varsovia y a sus ciudadanos. Vecinos y amigos empiezan a señalar a los polacos judíos. Se les niega la nacionalidad para ser señalados como "judíos", como si hubiera algo malo en ellos. Empiezan a llegar las primeras restricciones: el doctor Korczak se queda sin su programa de radio, separan a los alumnos en las universidades en polacos y judíos; no se permite a los judíos formar parte del ejército polaco... entre otras medidas.
Esta peste de "corriente" acaba por instaurarse con rapidez, llegando a formar un gueto en poco tiempo, un gueto donde los judíos no podían entrar y salir libremente, eran apartados de la sociedad sin miramientos, como si no fueran personas. Un gueto donde los judíos vivían hacinados y morían de hambre. Algunos arriesgaban sus vidas con el contrabando para poder sacar con vida a sus familias. Todo esto sin olvidar la mano negra de la Gestapo. Semana a semana, viviremos a través de los protagonistas cómo cada vez la situación empeora cada vez más: con más miedo, más medidas, más violencia y más horror.
Los protagonistas luchan por buscar una salida, viajan fuera de Varsovia pero todavía es peor. Las humillaciones que sufren los judíos son innombrables y ellos, desesperados, se encuentran en un laberinto sin salida.
Es una novela romántica, se centra mucho en la relación entre Misha y Sofía, cómo buscan una escapatoria para poder vivir juntos y tranquilos, lejos de las manos de Hitler. Aunque para ello tendrán que renunciar a muchas cosas, incluso a tiempo juntos. Con capítulos cortos y a través de esta bonita relación entre los protagonistas, conoceremos la cruda realidad de este oscuro período de la historia. Si sois aprensivos, no es de las novelas más duras que he leído, te muestra la realidad, sin recrearse en ella, sin ahondar en la herida. Es una historia de esperanza en mitad de un mundo devastado y desolado.
Como pero diría que el prólogo desvela más de la cuenta, creo que con las dos últimas páginas servía de sobra. Y sí que eché en falta más profundidad en cuanto a los sentimientos de los protagonistas, dado que la autora le da voz a los dos y se centra tanto en su relación, le hubiera aportado más sensibilidad para empatizar más con ellos y no solo con el entorno en el que estaban.
Esta peste de "corriente" acaba por instaurarse con rapidez, llegando a formar un gueto en poco tiempo, un gueto donde los judíos no podían entrar y salir libremente, eran apartados de la sociedad sin miramientos, como si no fueran personas. Un gueto donde los judíos vivían hacinados y morían de hambre. Algunos arriesgaban sus vidas con el contrabando para poder sacar con vida a sus familias. Todo esto sin olvidar la mano negra de la Gestapo. Semana a semana, viviremos a través de los protagonistas cómo cada vez la situación empeora cada vez más: con más miedo, más medidas, más violencia y más horror.
Los protagonistas luchan por buscar una salida, viajan fuera de Varsovia pero todavía es peor. Las humillaciones que sufren los judíos son innombrables y ellos, desesperados, se encuentran en un laberinto sin salida.
Es una novela romántica, se centra mucho en la relación entre Misha y Sofía, cómo buscan una escapatoria para poder vivir juntos y tranquilos, lejos de las manos de Hitler. Aunque para ello tendrán que renunciar a muchas cosas, incluso a tiempo juntos. Con capítulos cortos y a través de esta bonita relación entre los protagonistas, conoceremos la cruda realidad de este oscuro período de la historia. Si sois aprensivos, no es de las novelas más duras que he leído, te muestra la realidad, sin recrearse en ella, sin ahondar en la herida. Es una historia de esperanza en mitad de un mundo devastado y desolado.
Como pero diría que el prólogo desvela más de la cuenta, creo que con las dos últimas páginas servía de sobra. Y sí que eché en falta más profundidad en cuanto a los sentimientos de los protagonistas, dado que la autora le da voz a los dos y se centra tanto en su relación, le hubiera aportado más sensibilidad para empatizar más con ellos y no solo con el entorno en el que estaban.