Hace unos meses que disfruté de la Siempre él , la primera parte de esta bonita bilogía , así que me alegré mucho al ver que la editorial no tardaba en editar esta segunda parte , y así poder saber que era de la nueva vida de estos dos jóvenes que me robaron el corazón.

Han pasado unos meses Wes ha entrado a formar parte de un gran equipo de hockey canadiense, y no podía empezar con mejor pie ya que no deja de marcar goles y hasta puede conseguir el premio al mejor novato de la liga.

Jamie dejó su vida anterior para seguir a Wes, trabaja como entrenador de un equipo juvenil , y aunque no están teniendo un buen comienzo en la liga , él le pone mucha ilusión.

Wes y Jamie comparten piso , pero de cara a la galería simplemente son amigos , ya que si se supiera que Wes es gay quizás su carrera acabara antes de empezar. Así que están dispuestos a disimular mientras dure la temporada, pero no es fácil , y más cuando Blake , un compañero de equipo de Wes se ha mudado al mismo edificio y cada dos por tres se presenta en su puerta.
Si bien al principio lo asumen con mucha facilidad , la relación se va volviendo tensa , sobre todo por parte de Jamie ,al que la situación le va superando .
¿Podrán superar superar los obstáculos de esconder su relación? .

Si me gustó la primera parte , esta me ha gustado todavía más , quizás porque aunque empieza también con bastantes escenas hot, se van esparciendo y vemos como madura la relación y los protagonistas.

Tanto Wes como Jamie me encantan , y en esta ocasión me han hecho sufrir , por las dudas que tiene Jamie , por como va entrando en un pozo en el que necesita un cambio , y ahí está Wes , con todo el amor que le profesa para apoyarlo y darle el espacio que pueda necesitar.

Como secundarios aparecen más que en la primera parte , la familia de Jamie que han acogido a Wes como propio , el equipo del joven , pero hay que destacar a Blake , ese grandullón que al principio parece un poco pesado , pero que es todo corazón y bondad , y me ha dado la sensación como si pudiera tener su propia historia con la hermana de Jamie, ojalá fuera así , por que Blake no tiene desperdicio.

Ya comenté en la anterior entrega que me había gustado mucho la combinación de la pluma de las dos autoras, ya que han creado una historia con muchos matices , bien construida y sobre todo muy amena.
Está narrada a dos voces y así en todo momento conocemos los sentimientos de los dos protagonistas.

Siempre nosotros es una historia bonita , entretenida , con momentos muy dulces y otros amargos . Una historia de dos chicos que se quieren con locura , pero están metidos en un mundo donde los prejuicios pueden hacer mucho daño, y deben superar demasiados baches, aunque siempre acaba imponiéndose el amor.