Detalle de la opinión
4.9 5 0.5Una lectura sumamente recomendable
Valoración
5.0
Otra nueva novela de Donna Kenci que, desde que leí su primer libro, se ha convertido en una de mis autoras favoritas por ese estilo narrativo sencillo, fresco, simpático y maravillosamente romántico, que su lectura, queda grabada en mi corazón.
Dicen que “no hay peor ciego que el que no quiere ver” y que, “del odio al amor sólo hay un paso”. Pues en esta historia, la de Ethan y Jane, se pueden aplicar los dos refranes. A estos jóvenes cabezotas y voluntariosos, no ha habido manera, desde que se conocieron con diez años, que dejaran de luchar entre ellos, gastándose bromas pesadas, tantas que, hasta en el colegio les impusieron un chocante castigo.
Ahora ya son adultos, pero ese odio irreflexivo, sigue golpeándolos, a ellos y a todo el que les rodea. Pero, cuando existe una necesidad importante de solucionar los problemas que tienen, la alianza de un enemigo, puede ser mejor que nada,
El pacto va saliendo bien y es creíble para todo el mundo, pero... llega un punto en el cual, lo es también para ellos dos. Van descubriendo, poco a poco, que ese odio que se tienen es, simplemente, una negación a los sentimientos que, realmente, existen entre ellos.
Los personajes, me han encantado, todos. Empezando por Ethan y Jane, los cuales, cada uno tiene sus problemas internos. Ethan, ha carecido de una familia que lo amara y lo atendiera, salvo el amor de su hermana Maggie y que han marcado su comportamiento superficial y caótíco, lo que Jane, viéndolo desde fuera, juzga erroneamente. Por el contrario Jane, si que ha tenido unos padres amorosos, aunque protectores en demasía, pero para Ethan es una niña mimada y rica, que sólo desea fastidiarle. Maggie y Ty, el capitán del equipo, me han gustado mucho, lo mismo que otros personajes que acompañan a la pareja protagonista y que desempeñan un papel destacado en la narración.
Con una prosa sencilla, emotiva, unida a unos diálogos sumamente divertidos, la autora, nos presenta esta historia de un amor, que derribará todas las barreras que existen para la consecución de un final feliz. Es una lectura adictiva y con ese poco de intriga que, solo hace que enriquecer la historia y que me ha dejado con un buen sabor de boca y la consiguiente sonrisa feliz.
El final, me ha encantado, además de los dos epílogos que nos dejan claro lo que sucede después.
Una lectura sumamente recomendable.
Dicen que “no hay peor ciego que el que no quiere ver” y que, “del odio al amor sólo hay un paso”. Pues en esta historia, la de Ethan y Jane, se pueden aplicar los dos refranes. A estos jóvenes cabezotas y voluntariosos, no ha habido manera, desde que se conocieron con diez años, que dejaran de luchar entre ellos, gastándose bromas pesadas, tantas que, hasta en el colegio les impusieron un chocante castigo.
Ahora ya son adultos, pero ese odio irreflexivo, sigue golpeándolos, a ellos y a todo el que les rodea. Pero, cuando existe una necesidad importante de solucionar los problemas que tienen, la alianza de un enemigo, puede ser mejor que nada,
El pacto va saliendo bien y es creíble para todo el mundo, pero... llega un punto en el cual, lo es también para ellos dos. Van descubriendo, poco a poco, que ese odio que se tienen es, simplemente, una negación a los sentimientos que, realmente, existen entre ellos.
Los personajes, me han encantado, todos. Empezando por Ethan y Jane, los cuales, cada uno tiene sus problemas internos. Ethan, ha carecido de una familia que lo amara y lo atendiera, salvo el amor de su hermana Maggie y que han marcado su comportamiento superficial y caótíco, lo que Jane, viéndolo desde fuera, juzga erroneamente. Por el contrario Jane, si que ha tenido unos padres amorosos, aunque protectores en demasía, pero para Ethan es una niña mimada y rica, que sólo desea fastidiarle. Maggie y Ty, el capitán del equipo, me han gustado mucho, lo mismo que otros personajes que acompañan a la pareja protagonista y que desempeñan un papel destacado en la narración.
Con una prosa sencilla, emotiva, unida a unos diálogos sumamente divertidos, la autora, nos presenta esta historia de un amor, que derribará todas las barreras que existen para la consecución de un final feliz. Es una lectura adictiva y con ese poco de intriga que, solo hace que enriquecer la historia y que me ha dejado con un buen sabor de boca y la consiguiente sonrisa feliz.
El final, me ha encantado, además de los dos epílogos que nos dejan claro lo que sucede después.
Una lectura sumamente recomendable.