Hoy traigo una reseña de un libro que para mí es especial, recurro a él siempre que tengo bloqueo, porque es tan bonito, tan de verdad que te afloran los sentimientos en cada palabra que lees.

Ana vuelve a Canaleja con su hija Sofía, huyo de España el día de su boda, con un corazón roto y lleno de culpa. Ahora vuelve al pueblo como el nuevo chef del resort que han construido. Su sorpresa será mayúscula cuando se presente ante su nuevo jefe y no es otro que Leo, el culpable de sueños y anhelos.
Veranos, risas, juegos y besos furtivos serán la carta de presentación de este amor que irá mas haya del tiempo y la distancia.

Leo, siempre ha antepuesto a los demás a él, y eso hizo que perdiera lo único que ha querido de verdad, pero esta dispuesto a enumerador sus errores y no dejar escapar la oportunidad que les ha brindado de nuevo el destino.

Ana tiene miedo, sabe que todo puede saltar por los aires y esta vez le será imposible poder volver a recomponer su pobre corazón, pero la necesidad es mayor que el miedo, y lo que siente hacia el es un sentimiento tan encarnado que le es imposible escapar.
Los personajes secundarios también son magníficos, Mili la abuela de Leo, mujer fuerte, sabia, cariñosa, será la gran cómplice en esta historia. La pequeña Sofia, hará las delicias del lector, con su desparpajo.

A lo largo de sus 246 paginas y con una pluma sencilla, pero precisa la autora nos ira narrando esta historia de amor, que empieza en la niñez y va evolucionando hasta la actualidad.
Uno de los puntos fuertes de este libro es su narración, es simple pero directa, con descripciones tan precisas que parece que estés paseando por el pueblo, jugando al escondite, o tocando la pared de la iglesia.

Creo que no tengo palabras que puedan expresar sensaciones despierta esta historia, Donna Kenci tiene el don de transportarte a ese primer amor, ese primer beso y junto a ellos vuelves a sentir.

Os dejo palabras de leo y Ani a ver si ellos os lo explican mejor.

¿Por qué no puedo decirte amore?
¡porque me recuerda a la época en la que aún me querías ¡
Ana, yo.. nunca he dejado de amarte.

Esta es la primera novela que leo de Donna Kenci y ya puedo decir bien alto que no va a ser la última. No suelo leer muchas novelas actuales y, menos aún, las que están narradas en primera persona. Pese a todo, la novela me ha gustado tanto que no puedo más que recomendarla.

La historia se centra en Ana y Leo y en su relación a lo largo de los años: desde su enamoramiento de juventud hasta su noviazgo y su ruptura. Años después, cuando Ana vuelve al pueblo donde se enamoraron para ocuparse del cargo de chef en el hotel que van a abrir, su jefe no será otro que Leo. Y Ana no viene sola, lleva consigo a Sofía, la hija de ambos.

No quiero mencionar mucho más del argumento porque creo que merece la pena, sencillamente, leerlo sin saber más detalles. “Cuando no te tengo” es una de esas novelas que se disfrutan más conforme las vas descubriendo, página a página. La historia es de segundas oportunidades, de cómo muchas veces enredamos las situaciones por no haber sido más honestos con nosotros mismos y con las personas que queremos. Y de cómo, con el tiempo, nos damos cuenta y lo solucionamos, dejando el pasado atrás y empezando de nuevo con plena confianza. Esa es la moraleja preciosa que nos deja esta novela y que hace que termines el libro con una sonrisa en los labios.

La historia es tan real, tan mundana, que podría pasarle a cualquiera. Los personajes están muy trabajados, tanto los principales, como los secundarios. Todos tienen su función y ninguno deja en las sombras a nadie. Me ha encantado el personaje de Emilia y el de Marta y me encantaría saber la historia desde la perspectiva de Enzo o leer acerca de cómo él mismo encuentra su propia felicidad.

La novela, como digo, está narrada en primera persona. Eso hace que conozcas a la perfección a los personajes protagonistas. Porque sí, no sólo es Ana la que nos cuenta la historia, sino Leo también. Los capítulos del libro se van alternando de un narrador a otro y está muy bien llevado a cabo por la autora. Además, las escenas del pasado de cada uno se van intercalando con el relato en el presente, de manera que llegamos a entender perfectamente todo lo que les ha ido pasando y cómo han llegado a estar donde están.

La narrativa es muy amena. La novela está bien escrita y logra meterte en la historia desde las primeras líneas. Me gusta, especialmente, el cariño con el que describe Canaleja y sus rincones. Ha hecho que, al cerrar los ojos, pueda imaginármelo todo perfectamente. En definitiva, es una novela que recomiendo. Es una lectura amena y muy bonita, llena de romanticismo y buenos personajes, de esos libros que recuerdas tiempo después.

Lo bueno de leer a nuevas autoras son las sorpresas que te llevas, con esta he tenido una muy agradable, de lo cual me alegro mucho.

Me he encontrado con una historia preciosa y dulce, que compagina el presente y el pasado, cosa que me encanta, ya que vas descubriendo todos los entresijos conforme pasan los capítulos, y es algo que crea una especie de intriga que te tira de un hilo para conseguir llegar al final.

La trama es sencilla y cotidiana: un amor adolescente que pervive, pero que alguna decisión errónea lleva a la destrucción de unos sueños compartidos para un futuro maravilloso. Años después, se encuentran y se dan cuenta que ese amor de entonces sigue firmemente vivo. Tratarán de enmendar aquella terrible decisión, pero no será tan fácil, porque hay secretos que pueden hacer daño. No obstante, el amor verdadero no conoce límites para el perdón y la reconciliación.

Con respecto a los personajes, me han parecido muy bien construidos. La pareja protagonista, Leo y Ana, me han llegado al corazón, sobre todo en su amor de juventud. Un amor sin retenciones, con entrega total y proclive a hacer grandes sacrificios, aunque se hayan convertido en decisiones no muy acertadas, pero con una maravillosa intención de beneficiar al ser que aman. Leo es un encanto, además de atractivo, es leal, trabajador y protector. Ana es alegre y confiada, dispuesta a sacrificar todo por estar al lado de su gran amor.

Hay secundarios que me han gustado mucho, también. La primera y motivo de parte de la ternura que se percibe en toda la narración, Sofía, la hija de Ana, me ha encantado. Enzo, que pese a su egoísmo inicial, cambia hacia bien con el paso del tiempo y reconoce sus errores. Marta, la amiga del alma de Ana, la cual está siempre al lado de ella, ayudándola y consolándola, depende de la situación. Y la abuela que todos deseamos, Emilia, la cual siempre ha apoyado la relación entre su nieto y Ana.

He disfrutado leyendo esta novela que me ha enganchado desde el principio, y que me ha hecho llorar, reír y ha despertado muchos sentimientos y recuerdos, ya que todos hemos tenido un amor así en nuestra juventud y, para algunos, ha resultado un final feliz, aunque para otros haya quedado en agua de borrajas. Es un canto a las segundas oportunidades que nos reserva el destino y a descubrir que si el amor es verdadero, dura una eternidad.

Lo recomiendo encarecidamente.

Sin duda esta es una de esas reseñas que me cuesta hacer, más que nada es porque cuando una novela me gusta y me llega tanto, temo no expresarlo como debiera.

Cuando no te tengo es una historia que descubrí por casualidad, aquí en la web, cuando la autora la compartía de forma gratuita. Lo primero que me pregunté mientras la leía es por qué no estaba pagando por leer esa preciosidad de historia; y descubrí que teníamos una "nueva" escritora de calidad en el terreno.

La alegría que me dio cuando supe que la autora se animaba a dar el salto al publicarla —con algún pequeño cambio con el que estoy totalmente de acuerdo—, tal y como esta historia merece, me hizo tremendamente feliz. Y es que, Cuando no te tengo es una novela que merece estar en la estantería de mucha gente; para verla, tocarla y olerla o para disfrutar de ella cuando nos plazca.

Esta novela nos cuenta la historia de Ana y Leo. Dos jóvenes que se conocieron siendo apenas unos niños y compartieron una intensa y preciosa historia, pero que el destino se las apaña para separarlos y complicarles la vida... Años después, Ana y Leo se encuentran, pero las heridas y secretos del pasado no serán fáciles de olvidar...

He intentado resumir mucho lo que esta novela esconde tras sus páginas, pero no le hace ni una mijita de justicia. Pero no puedo contar más, merece ser leída y disfrutada por uno mismo.

La historia de Leo y Ana es tremendamente conmovedora, a la vez que intensa, pasional, incluso divertida y muy, muy romántica.

Me parece muy acertado cómo la autora ha elegido meternos en la trama, ya que nos va contando el presente que viven nuestros protagonistas, a la vez que nos va desvelando lo que ocurrió en el pasado para que se encuentren en semejante tesitura.

Además, la historia está narrada en primera persona por ambos personajes, intercambiando de punto de vista en diferentes capítulos; algo que me encanta, pues así nos ayuda a saber de primera mano lo que piensan y sienten ambos personajes.

Si este es el inicio de la autora en la literatura romántica, me atrevo a afirmar que las lectoras tenemos mucha suerte, pues su manera de narrar me ha parecido exquisita, y sin duda pienso que tiene algo especial en su pluma, con la que a mí al menos me ha transmitido mucho. Hasta tal punto de cogerme ese pellizco de emoción en el pecho que hace que conecte con esa historia de una manera especial. Tanto, que sin duda se ha convertido en una novela importante para mí, además de imprescindible y súper recomendable.

Como veis solo tengo elogios para esta novela y su autora, y es que sin duda ha sido todo un descubrimiento.

Recomiendo encarecidamente que la descubráis. Es una escritora a tener muy en cuenta.

Mi enhorabuena para ella.

Después de leer esta bonita historia me ha quedado una gran resaca literaria, quería llegar al final del libro, pero no quería dejar de lado a dos personajes que me han tenido enamorada a lo largo de la historia, y que seguro recordaré durante bastante tiempo.

Leo y Ana se conocieron siendo adolescentes, coincidían cada verano y poco a poco se enamoraron, pasaron unos años juntos, pero las malas decisiones que tomaron acabaron por separarlos.

Han pasado unos años y vuelven a reencontrarse. Leo es el propietario de una cadena de hoteles y Ana se ha convertido en una gran chef que va a trabajar para él sin ni siquiera saberlo.

Cuando vuelven a verse los sentimientos resurgen porque nunca les han abandonado, pero ¿serán capaces de perdonar y perdonarse para poder vivir ese gran amor?

Donna Kenci irrumpe en nuestro panorama con fuerza, y yo ya me considero una seguidora suya que la anima a que siga haciéndonos disfrutar de esta manera.

Además de una historia preciosa, ha creado unos personajes a los que hay que adorar desde el momento en el que hacen su aparición.

Ana intentó rehacer su vida cuando le rompieron el corazón, sin embargo, este nunca ha colaborado porque siempre ha estado ocupado por Leo. Se ha convertido en una mujer valiente, fuerte, que tuvo que abandonar todo lo que conocía y se ha dedicado a lo que siempre ha querido, ser chef. Con su vuelta a casa no esperaba encontrarse de nuevo con Leo, pero ¿acaso la vida les está dando otra oportunidad?

Leo se ha convertido en un hombre de éxito, ha subido muy alto, sin embargo su corazón siempre ha estado estancado. Cuando vio que Ana estaba interesada en el puesto no dudó en contratarla y de paso ¿conseguir su perdón?

Ambos personajes me han encantado, con sus errores, sus miedos, sus anhelos y esperanzas, pero sobre todo por el gran amor que se profesan y que no pueden ocultar.

Hay personajes secundarios muy importantes en la historia que no mencionaré, porque hay que leer la novela para saber cómo complementan e influyen en nuestros protagonistas.

La pluma de la autora me ha encantado, es sencilla pero elegante; ha creado una historia dulce y bonita que me ha dejado con una sonrisa boba en la cara.

La narración es en primera persona y corre a cargo de Leo y Ana, alternando también capítulos del pasado, de esa manera nos queda muy claro lo que piensan y sienten y también qué fue lo que aconteció años atrás.

Cuando no te tengo es una historia preciosa, tierna, conmovedora y muy romántica, una historia de sentimientos, de dolor, de perdón, pero sobre todo que habla de un gran amor que ha perdurado con el paso de los años. Con unos personajes muy completos que emocionan y enamoran, que me han hecho suspirar y sentir mariposas en el estómago. Una historia que seguro releeré en más de una ocasión y que recomiendo a todo aquel que le guste la novela romántica.

Mis más sinceras felicitaciones a Donna porque nadie diría que es su primera novela y que ojalá siga escribiendo historias como esta.