Cupido, tenemos que hablar

de-cupido-tenemos-que-hablar

Detalles del libro

ISBN-10
8412824504
Subgénero
  • Romántica actual
Fecha
14 de Febrero, 2024
Editorial
¡Lo quiero!

Mi nombre es Valeria y acabo de romper con mi novio delante de toda su familia cuando se suponía que anunciaríamos nuestro compromiso, y, para colmo, es el día de los enamorados. ¿Se puede caer más bajo? Al parecer, sí, porque mis amigas me sacaron de fiesta para olvidarme del dolor y acabé en la cama de un Cupido francés con cuerpo de dios griego.

¿Qué quién es Cupido? Ojalá lo supiese porque me urge hablar con él sobre el pequeño regalo que me ha dejado y que llegará en menos de nueve meses a mi caótica vida. Por suerte, tengo unas amigas tan maravillosas como locas que me apoyan y no han dudado en ayudarme a localizarlo.

¡Francia, allá vamos!

Opiniones de los usuarios

1 opinión
Valoración
 
4.0(1)
déjate flechar
Valoración
 
4.0
En esta divertidísima novela conoceremos la historia de Valeria y Valentin. Pero sin tilde, porque es francés y ha dado un giro interesante a la ciudad del amor y al jugar con los nombres, ha estado muy bien relacionar así a dos de los dioses de la mitología como son la griega y la romana con el ámbito de adoración que les tocaba.
No es la primera novela que leo de la autora y, como en su comedia anterior, las risas están aseguradas.
Pero también me ha gustado que vaya más allá y trate temas interesantes de conocer, dándole así un toque más dramático e incluso de aventuras y misterio porque hacia el final del libro hay una subtrama inesperada que provoca (aún más) las ganas de seguir leyendo. Con esto convierte a la literatura en un arma que va mucho más allá de un mero entrenamiento.
Se lee también muy fácilmente porque los capítulos son cortos, con muchas situaciones disparatadas y además hay varios POV que permiten poder empatizar con los personajes. Y explicó esto porque, a veces no lo he conseguido del todo con ella, porque me daba la sensación de que parecía delegar más que en tomar las riendas de su vida. Aunque en parte la entiendo puesto que, sus precedentes amorosos... La dejan bastante marcada, incidiendo así en el impacto de los primeros amores en nuestras vidas y sobre todo, advirtiendo que no debemos utilizarlos como vara de medir para con el resto de relaciones importantes de nuestras vidas. Porque el sentimiento evoluciona.
Además, recuerda también que no podemos rechazar conocer a nuevas personas en nuestras vidas porque nunca sabremos de su importancia y también, que toda acción tiene su consecuencia. Eso, en cambio no me ha sucedido con Valentin, con quien las apariencias engañan y que solo diré que quiero uno en mi vida. Él demuestra que la madurez no va asociada a una edad y que las circunstancias en las que hemos sido creados tienen un enorme impacto en nosotros. Para bien o mal. Asimismo, recuerda que, por sorprendente que parezca dada la sociedad en la que vivomos, aún hay actitudes, comportamientos y situaciones propias de otros siglos. Otro aspecto que podría haberse tratado más es la ambientación, que se me ha quedado escasa y que podría haberse tratado mejor sería la ambientación. Pasa por encima demasiado en ocasiones y creo que puede ayudar a explicar mejor la personalidad de los personajes, además de que yo necesito estar bien situada en lo que a contexto se refiere. Al ser una novela de amor hay mucho amor aquí y no siempre sano. Así recuerda que la familia puede ser tóxica y que sobre todo, aunque la paternidad es difícil hay que respetar la individualidad de los hijos, porque intentar cambiar al otro nunca es positivo. Y además también que el hecho de tener el mismo grupo sanguíneo que otro no nos da derecho ni a criticar ni a controlar su vida. Hay que ser más empáticos y respetuosos en ese sentido. Junto a ello, recuerda también que el traer un niño al mundo es una responsabilidad muy grande y por eso, hay que pensar muy bien todo. Pero que jamás hay que usarlo de excusa o arma arrojadiza para que salga mal. Hay amor por los amigos, la familia que se escoge y ha sido fantástica la sororidad de Nerea y Julia, soy muy fan de la 1 y recuerda que la diferencia enriquece. Y por último, habiendo un cupido y un Valentín por medio hay amor romántico sano. Y fuerte que se enfrenta a más de una dificultad en la travesía pero que demuestra que son las personas quienes hacen hogar y no los lugares. Pero sobre todo que quien bien te quiere lo hará libre, aunque eso sí, no podemos querer bien a los demás si no nos queremos bien a nosotros mismos. Huelga decir que quiero saber más de la que se intuye próxima pareja porque, una vez más, las risas están aseguradas.
¿Os dejáis flechar?
Es útil la opinión? 0 0