Detalle de la opinión

4.3 2 0.5
el_verano_que_aprendimos_a_volar
Romántica actual 499
Es una novela fresca y sensual
Valoración
 
4.0
Este es uno de esos libros que al principio no me llamó mucho la atención, sin embargo, en las redes solo había buenas opiniones y eso acabó por convencerme, y me alegro mucho porque lo he disfrutado un montón.

Lara ha terminado la carrera de Ingeniería biomédica hace poco, sin embargo todos los intentos de encontrar trabajo han sido en vano, pero como quiere ser un alivio para sus padres ha aceptado un puesto como recepcionista en un camping durante los tres meses de verano.

Asier es la primera persona con la que se cruza Lara, y que la deja embobada con sus shorts y sin camiseta, es el monitor de tenis del camping y enseguida se la gana con su simpatía y descaro.

Entre los dos saltan chispas desde el primer momento, y Asier no cejará en acercarse siempre que puede a Lara para seducirla, pero ella se le resiste, sin embargo, la química que hay entre ellos es tan grande que acabaran iniciando una relación.

Me han encantado Asier y Lara, aunque a él le hubiera dado algún que otro mamporro, Lara es una joven de veintitrés años que prácticamente se ha dedicado siempre a estudiar, es leal, sincera y algo insegura, la vamos viendo evolucionar a lo lardo de la historia, y con Asier aprende a volar. Tú pide, yo vuelo.

Asier, es un encanto, es difícil no enamorarse de él, divertido, algo chulesco, pero a la vez dulce y tierno, sin embargo, no todo es la apariencia, porque detrás de todo su desparpajo se encuentra un hombre que hace poco ha pasado por una difícil situación y de la que no se siente orgulloso.

Desde un principio entre los dos hay una buena conexión y para Asier, Lara es su tabla de salvación, ella le devuelve la alegría y va haciendo bajar sus defensas poco a poco.

Como secundarios, aunque salen unos pocos, hay que destacar a Natalie, la compañera de cabaña de Lara, una joven desenfadada, un poco loca, que consigue sacarte alguna carcajada.

La historia está narrada por Lara y vivimos con ella un sinfín de emociones, la autora también ha hecho que Asier narrara unos pocos capítulos, pero me hubiera gustado saber un poquito más de él.

Me ha gustado mucho esta historia porque sobre todo es divertida, sin embargo le he encontrado un par de peros. Por una parte, Asier va dando largas para explicar a Lara lo que le pasó y me he ido haciendo una montaña pensando que sería algo gordo, cuando, al saberlo no le he encontrado para tanto, y entonces no me esperaba la determinación que toma Asier. Por otra parte, hacia un poco más de la mitad del libro me han parecido excesivas las escenas de sexo y ha hecho que se me hiciera un pelín pesado, ya que esperaba llegar al final para saber cómo acabarían esta encantadora pareja.

En definitiva, El verano que aprendimos a volar es una novela fresca y sensual, que en general me ha hecho reír, aunque también he tenido mis momentos de sufrimiento, narrada de forma cercana, con algo de descaro y unos diálogos con muchos toques de humor, y con unos personajes fuertes que aprender a volar juntos y atesoran cada minuto que compartido, va a ser difícil olvidarse de ellos.

Mi enhorabuena a la autora porque para ser su primera novela, entra por la puerta grande, y no tengo ninguna duda de que seguiré sus pasos.
Es útil la opinión? 0 0