Hacía ya varios meses que este libro estaba esperándome en la estantería, y eso, que solo veía buenas opiniones de él, sin embargo no había encontrado el momento de cogerlo, menos mal que cuando llega el verano y no hay nuevas publicaciones tienes que ir echando mano a los que ya tienes, y digo menos mal, porque el libro me ha encantado, me he llevado una gran sorpresa y solo espero seguir leyendo las historias de los hermanos Landvik.

Eli es la protagonista de esta historia, una chica guapa y refinada que ha terminado su master de derecho en el extranjero y ahora debe pensar que hacer con su vida, aunque ya la tiene muy dirigida por su madre, pero ahora toca pasar unos días en la costa junto con sus amigas, Tana, Alba y Sandra, ante la inminente boda de Alba.

El primer día de sus vacaciones Eli tiene un inesperado incidente que cambiará su vida, ya que tiene la ocasión de conocer al hombre más guapo, enorme y sexy que haya visto jamás, y que le produce sentimientos encontrados, ya que la atrae pero le da un poco de miedo su aspecto feroz.

Cas a pesar de su aspecto un tanto macarra, debido a los tatuajes que ocupan buena parte de su cuerpo, es un hombre tranquilo que lleva una vida sin complicaciones, tiene un taller de restauración de motos que ha conseguido debido a su esfuerzo y del que está muy orgulloso.

Pero su tranquilidad se verá afectada por una preciosidad de chica que dando marcha atrás estampa su coche con su adorada moto, y eso hace salir su fuerte carácter, medio alemán medio noruego, aunque no puede evitar quedarse pillado ante la cándida mirada de Eli.

Eli y Cas coinciden en un par de ocasiones, e incluso tienen una cita, que ha orquestado su amiga Tana, y aunque esa primera vez es un desastre, Cas no cejará, y así poco a poco, inician una relación en la que los dos se dan cuenta de que no son lo que a simple vista parecen, ni Cas es tan rudo como aparenta, ni Eli es tan insustancial como parece, y sin darse cuenta sus vidas cambiarán en el momento en el que den rienda suelta a su atracción y deseo, pero ¿que pasará cuando Eli tenga que volver a su vida perfectamente orquestada?.

Decir que tanto Eli como Cas me han encantado, es quedarme corta, Eli es una chica que aunque ha estudiado una carrera, está predestinada a ser la mujer florero de Lalo, un hombre de su status social, y es que su vida está dirigida totalmente por su madre, pero cuando Eli conoce a Cas, comienza a florecer una Eli diferente que se rebela ante la vida tan vacía que le espera, y quizás por Cas vale la pena arriesgarse.
Cas, es un personaje que enamora sin remedio, igual que sus dos hermanos, en apariencia es rudo, bruto, algo macarra, pero en realidad es un hombre que puede ser muy dulce y sensible, y sobre todo, con una gran capacidad de sacrificio, cuando se refiere a los suyos.

Como secundarios hay varios y algunos valen mucho la pena, como son los hermanos de Cas, Jan y Till, que desde luego dan mucho juego a la novela y de los que tengo muchas ganas de leer su propia historia, porque también me han encantado ; las amigas de Eli, sobre todo Tana, que no se corta un pelo a la hora de cantarle las cuarenta a Eli con tal de que espabile, y también tenemos a la familia de la protagonista, sobre todo la madre es un personaje al que odias el tiempo que aparece en escena, y otro personaje para darle de comer a parte también, es Lalo, un hombre frio, prepotente y despreciable .

La forma de escribir de la autora me ha gustado mucho, es directa y amena, lo que la hace totalmente adictiva, empiezas a leer y no encuentras el momento de parar, y la historia está escrita en tercera persona desde la perspectiva de los dos personajes, por lo que los conoces perfectamente a los dos.

En definitiva, La historia de Cas es una novela dulce y romántica que atrapa desde la primera página, con una trama que puede parecer trillada, pero que la autora ha sabido darle unos giros que te dejan con la boca abierta, y con unos personajes que van evolucionando conforme avanza la historia ,ya que provienen de clases sociales muy diferentes y son opuestos como el día y la noche, sin embargo, se complementan a la perfección, aunque tienen que luchar contra viento y marea para poder estar juntos.