Cuando empecé este libro pensaba que era una comedia romántica en toda regla ideal para estos días de calor , pero cual ha sido mi sorpresa que , aunque tiene alguna que otra escena divertida , también tiene bastante carga dramática, por lo que yo no lo calificaría ni mucho menos de comedia.

January no está pasando por un buen momento , acaba de heredar una casita al lado de un lago que le ha dejado su padre al morir, su padre que siempre había sido un ejemplo y un pilar donde apoyarse , sin embargo acaba de enterarse que tenía una doble vida. Además su novio desde hace seis años ha roto con ella y por si fuera poco tiene que entregar un libro a primeros de septiembre y aún no sabe por donde empezar.
Su vida no podía ir peor , ¿o si? por que la primera noche en la casita se encuentra con una fiesta que no la deja dormir , justo en la casa de al lado , y cuando se enfrenta al dueño , su sorpresa no puede ser mayor , pues tiene frente a ella a alguien que ya formaba parte de su pasado.

August lleva varios años viviendo en la tranquilidad de esa pequeña localidad, tiene en mente un libro y está investigando , pero también está en una situación parecida a January , tiene bloqueo , no es capaz de escribir .
Gus no es muy dicharachero , ni siquiera demasiado sociable , y es que también tiene una buena cantidad de cargas a sus espaldas.
La llegada de su nueva vecina , a la que en un principio no parece reconocer , hace que comiencen un tira y afloja constante , y por si fuera poco hacen una apuesta, ella tendrá que escribir algo fuera de su género habitual , el romántico con finales felices, y Gus deberá escribir algo con un final feliz.

Me costó un poco entrar en la historia , quizás porque me había creado otras expectativas , pero poco a poco me he ido haciendo a los protagonistas y me han gustado.

January es una joven a la que el mundo se le ha caído encima , han pasado muchas cosas buenas y malas en su familia y siempre han sido los tres, un bloque unido . Por eso cuando descubre que su padre tenía otra vida aparte de su madre y ella , se viene abajo .
Decide ir a la casita y venderla , sin embargo , se niega a leer la carta que su padre le dejó y con la que puede aclarar que sucedió.
Cuando se da cuenta de que su vecino es Gus , con el que compartió clases en la universidad y con el que siempre estaba enfrentada , no le gusta nada . Pero la apuesta , el club de lectura y los retos que ellos mismos se ponen para escribir , harán que pasen tiempo juntos y como no , si hubo una vez una atracción vuelve a aparecer.

Gus es un hombre muy reservado , le cuesta abrirse y tiene reacciones que en principio no entendemos , pero poco a poco vamos descubriendo que también tiene un pasado doloroso y su vida ha sido una constante desilusión , solo su tía Pete y la esposa Maggie , han estado siempre al lado de él.

Como secundarios habría que destacar a Pete y Maggie , que le dan el toque divertido a la historia y también Sadie , la amiga de January que también es de armas tomar.

La pluma de la autora es ligera y fresca , y la narración corre a cargo de January , por eso quizás en ocasiones me ha quedado un poco incompleto Gus.

La novela del verano es una historia entretenida en ocasiones divertida pero con bastante carga dramática, una historia que te tiene enganchada esperando ver que ocurrió y por qué , si todo parecía tan perfecto , y eso hace que avances en la lectura y no te des cuenta.
Unos personajes sencillos que están viviendo un mal momento cada uno por su lado , y juntos emprenderán un nuevo camino que les hará salir del bucle de decepciones en el que habían entrado.