Blue es una mujer que sobrevive como puede. Con una infancia muy difícil, no ha tenido un hogar fijo. Tiene una madre que se preocupa más por otras personas que por su propia hija así que no ha tenido más remedio que ser independiente desde muy joven.
Un día volviendo tras uno de esos trabajos tan particular, se cruza en su vida Dean.

Dean es un hombre que ha tenido éxito en su vida profesional. Es un famoso jugador. Es rico, guapo e irresistible.
Dean se encuentra a Blue en un estado complicado y decide ayudarla.
Cuando se conocen algo surge entre ellos. Y varios acontecimientos hacen que la lleve a su casa en el campo. A donde se dirigía para ver cómo va la restauración que está haciendo.

En primer lugar, debo decir que cuando leí la sinopsis me esperaba otra cosa. Me costó engancharme a la historia, pero esperaba que fuera mejorando poco a poco... me ha desilusionado un poco.

La historia entre Blue y Dean, si es bonita. Van poco a poco, porque para ninguno de los dos es fácil confiar en otra persona, debido al difícil pasado de ambos.

Pero lo que no me ha gustado es que para mi gusto, la novela se centra más en personajes secundarios como los padres de Dean, que en ellos mismos.

Hay detalles, escenas y momentos de la historia que me sobran. Hubiera preferido ver momentos más sentimentales entre los protagonistas.
Porque en los momentos que los hay, son muy buenos. Pero me ha faltado algo más ellos, más complicidad, más amor...

Es la primera novela que leo de esta autora, y tenía ganas por las buenas opiniones que he leído de ella, pero creo que para leer algo más de ella esperaré.

mi valoración 2/5.