Esta autora me tiene ganada. Da igual que escriba una novela corta o más extensa, el caso es que me lo paso en grande con todas. Ninguno de sus libros me ha defraudado por el momento y es por ese motivo que se ha convertido en una de mis escritoras favoritas a día de hoy.

Novio por treinta días es una novela corta de poco más de cien páginas con la que he disfrutado de principio a fin. A mí no me suelen gustar los libros románticos con tramas de jefes y empleadas, pero tengo que confesar que Whitney G está haciéndome cambiar de opinión, sobre todo con historias tan intensas y entretenidas como esta.

Lo que me he podido reír con las pullas entre Nicholas y Emily, con esas notas, y con sus "calentones" cada vez que estaban cerca el uno del otro. Eran una olla a presión a punto de explotar cada vez que los dos entraban juntos en escena.

Para mí es una novela divertidísima y ardiente que se lee en un suspiro.

La química entre el todopoderoso Wolf y Emily es brutal, pero eso no es algo nuevo en esta autora, ya que es su sello inconfundible. Además, para las lectoras a las que os gusten los clichés, este libro tiene varios: se podría decir que se trata de un enemies to lovers con "relación falsa" de por medio. Sin duda, el fingir que son pareja ha dado un juego increíble en esta historia.

En definitiva, Novio por treinta días es una novela romántica cortita la mar de divertida, con escenas de alto voltaje, mucha tensión sexual entre sus protagonistas que a mí, al menos, me ha hecho pasar una estupenda tarde de lectura. He reído, he suspirado y he terminado el libro con una gran sonrisa en la cara. ¿Qué más puedo pedir?