Hice bien cuando decidí leer el primer libro cuando ya estaba en mi poder el segundo, y es que tal y como acabó necesitaba saber qué iba a pasar con Raquel y Malcolm, y me ha parecido perfecto, muy adictivo y muy bonito.

Tras el apoteósico final de la primera parte, Raquel está en su peor momento, por mucho que quiere acercarse a Malcolm y explicarse, este no se lo está poniendo nada fácil. Ha pasado un mes sin noticias de él y Raquel no se atreve a mirar las redes sociales, por si ha retomado su vida anterior. Una llamada inesperada citándola en M4, la empresa de nuestro chico, hará que Raquel vuelva a tener esperanza, aunque lo que se encuentra es a Saint con el jefe de recursos humanos ofreciéndole un trabajo en Interface.

Malcolm se muestra frío y no le da pie a Raquel de poderse disculpar, simplemente la quiere en su empresa, algo que la joven no está dispuesta a aceptar, porque ella lo que quiere es recuperar a Saint, no tenerlo como jefe. ¿Será capaz Malcolm de volver a confiar en ella?

Qué historia más bonita, me ha encantado y si ya me gustaron los personajes, ahora han acabado enamorándome, sobre todo Malcolm.

Raquel sigue siendo esa chica inocente, pero decidida, si decidida a volver a conquistar a Malcolm, y decidida a dar un paso en su profesión y hacerlo sin la ayuda del joven empresario, al fin va acabando con los prejuicios que tenía sobre él, sobre lo mujeriego que era, y va confiando en su propia capacidad de ¿enamorarlo?

Y Malcolm, ay Malcolm, aunque le cuesta volver a confiar en Raquel va avanzando poquito a poco, sin prisas, conociéndose bien y aunque no lo dice con palabras tiene unos gestos con ella que sin duda la enamoran más si cabe, como también me han enamorado a mí.

Como secundarios seguimos teniendo a los amigos, ¿habrá historia entre alguno de ellos? Habrá que esperar, pero me han encantado, también la madre de Raquel, pero también tenemos al malo de la historia, que me hubiera gustado que tuviera un poco más de papel en la historia.

La historia empieza de fábula, muy bonita, una relación que avanza despacito, luego entra en un bucle en el que hay muchas escenas sexuales, que se me ha podido hacer un pelín pesado, pero hacia el final es precioso, me ha encantado.

He visto que hay otra historia corta de ellos y me encantaría que la editorial la publicara para ver cómo les va a estos personajes a los que les he cogido mucho cariño.

La narración sigue siendo a cargo de Raquel y, este es uno de los libros en los que saber lo que ha sentido Malcolm en algunos momentos hubiera sido muy interesante, pero esta pequeña pega no ha quitado que me haya encantado esta historia y que me haya dejado con ganas de más.

Pecado: Por cada pecado hay un pecador es, si cabe, todavía más adictiva que la primera parte, una historia donde vemos evolucionar a los personajes, a Raquel luchar por lo que realmente es su prioridad y a Malcolm mostrar su cara más tierna y romántica. Para mi gusto, de lo mejorcito de esta autora.