Detalle de la opinión

5.0 1 0.5
todo_incluido_rg
Romántica actual 605
Un libro divinamente paradisiaco
Valoración
 
5.0
Con esta novela me inicié en la pluma de Rose y, aviso, el título es sumamente revelador ya que, tiene de todo.
Y también aviso de que la portada puede llevar a equívocos, ya que, aunque parezca muy veraniega, la realidad es que se puede leer en cualquier momento del año.
No sé si vosotros tenéis una categoría de libros que se llaman libros vitaminas o libros de vida. Yo sí, y este libro pertenece a esta categoría porque, todas y cada una de las veces que os decidáis a abrir sus páginas... vuestras vidas serán más larga.
Y aviso, leedla con pañuelos al lado o en soledad, ya que pueden miraros mal o pensar que estéis locos de tan bien como lo vais a pasar. Y las carcajadas estarán más que aseguradas en todo momento... a pesar de que ya sepáis qué va a pasar.
Una segunda advertencia que os doy es que os van a dar unas ganas irrefrenables de visitar la isla de Moorea para desear descubrir de primera mano si Noe, Lau, Maca, Álvaro, Ebert y Maui (ayyyy Maui, mi crush polinésico para siempre) existen y viven allí.
Es un libro grueso que, devoraréis y que además de pasarlo en grande con las risas y el amor, también hay mención y espacio para otros muchos temas serios y susceptibles de análisis. Incluso, advierto que aprenderéis un montón sobre historia y algunas de las supersticiones más comunes y utilizadas en la vida cotidiana de los romanos. Por si quisierais ponerlas en práctica.
Un canto a la sororidad y a la amistad, en la que se respetan las diferencias, que son las que enriquecen nuestras vidas. Y un recordatorio de que los hogares los hacen las personas que habitamos en él, no tienen por qué ser un lugar concreto.
Nos recuerda que las apariencias engañan y José Luis os robará el corazón, ya que es un pequeño rompecorazones.
Pero, es una novela de amor, el cual se ha de vivir sin tiempos y al que nunca podemos cerrarle la puerta o indicarle que no tiene espacio en nuestras vidas porque... es, de antemano una batalla que habremos perdido.
Sin embargo, para querer bien a los demás, debemos querernos bien a nosotros mismos, ya que nosotros también somos nuestro propio paraíso en la tierra y así es como siempre debemos considerarnos.
Por lo demás, solo me queda emplazaros de nuevo a que le deis una oportunidad a esta magnífica novela. Y sobre todo, avisaros de que, si reserváis un billete de avión dirección el paraíso de Moorea... es bastante probable que me encontréis por allí.
Es útil la opinión? 0 0