Detalle de la opinión
4.0 1 0.5Es sencilla, divertida
Valoración
4.0
Lo que más me gusta de las historias de Kristan Higgins, es la prosa divertida y humorística con la que suele escribir sus novelas y la simpatía de los personajes que crea. Cuando voy a empezar una novela suya, ya sé que me voy a reír, unas veces más y otras menos, pero siempre será una historia que me deja buen sabor de boca y que consigue la distracción en mi vida cotidiana. Por eso he leído todas sus obras, porque incluso la más floja de ellas, me introduce en un mundo con gracia.
En esta, nos cuenta la historia de una treintañera, Callie, que lleva toda su vida enamorada de Mark y que al recibir la negativa del chico para algo más, vuelve su vista hacia el atractivo nuevo veterinario, Ian. Pero este ha sufrido un terrible desengaño y no está por la labor de volver a tener otra relación.
Callie es como un temporal que arrasa todas sus inhibiciones. Es vivaz, alegre, positiva y muy apasionada en sus reacciones. Esto lo está sacando de sus casillas, pero no tiene más remedio que caer totalmente enamorado de ella. Aunque algún que otro equivoco parece que va a derrumbar ese incipiente amor.
Lo que me gusta de estas historias es cómo las cuenta la autora. Nos relata todo el ambiente del lugar en el que transcurre y sus paisajes, hasta sus hábitos alimenticios. Nos lo recrea con una gran cantidad de personajes, todos perfectamente retratados y algunos muy tiernos. Me ha gustado especialmente Noah, el abuelo de Calli, un personaje adorable, gruñón y tierno a la vez, con un corazón enorme. Pero hay muchísimos a los que les he tomado cariño, no puedes evitarlo.
No es, quizá, una obra esplendida ni fundamental. Carece de esa profundidad que tienen algunas de sus novelas, pero es sencilla, divertida, y cuenta las vidas cotidianas de una familia, con una protagonista principal, aunque también nos relata las historias paralelas de otros de los personajes. Consigue que te metas dentro de esta familia y que disfrutes viviendo con ellos todas las experiencias. Incluye, también, mascotas. Cosa que he observado hace en todos sus libros.
Si quieres evadirte de la cotidianidad de la vida y divertirte un rato, este es tu libro, sin duda.
En esta, nos cuenta la historia de una treintañera, Callie, que lleva toda su vida enamorada de Mark y que al recibir la negativa del chico para algo más, vuelve su vista hacia el atractivo nuevo veterinario, Ian. Pero este ha sufrido un terrible desengaño y no está por la labor de volver a tener otra relación.
Callie es como un temporal que arrasa todas sus inhibiciones. Es vivaz, alegre, positiva y muy apasionada en sus reacciones. Esto lo está sacando de sus casillas, pero no tiene más remedio que caer totalmente enamorado de ella. Aunque algún que otro equivoco parece que va a derrumbar ese incipiente amor.
Lo que me gusta de estas historias es cómo las cuenta la autora. Nos relata todo el ambiente del lugar en el que transcurre y sus paisajes, hasta sus hábitos alimenticios. Nos lo recrea con una gran cantidad de personajes, todos perfectamente retratados y algunos muy tiernos. Me ha gustado especialmente Noah, el abuelo de Calli, un personaje adorable, gruñón y tierno a la vez, con un corazón enorme. Pero hay muchísimos a los que les he tomado cariño, no puedes evitarlo.
No es, quizá, una obra esplendida ni fundamental. Carece de esa profundidad que tienen algunas de sus novelas, pero es sencilla, divertida, y cuenta las vidas cotidianas de una familia, con una protagonista principal, aunque también nos relata las historias paralelas de otros de los personajes. Consigue que te metas dentro de esta familia y que disfrutes viviendo con ellos todas las experiencias. Incluye, también, mascotas. Cosa que he observado hace en todos sus libros.
Si quieres evadirte de la cotidianidad de la vida y divertirte un rato, este es tu libro, sin duda.