Detalle de la opinión
4.5 3 0.5Dulce, romántica y emotiva
Valoración
4.5
Si Donna me conquistó con Cuando no te tengo, lo ha vuelto a hacer con esta historia tan tierna y bonita, y ya tengo claro que leeré todo lo que publique, porque me he convertido en una fiel seguidora.
Peter Dawson está enfermo, pero desde hace más de un año cuenta con dos personas, que aunque no coinciden entre ellos, van a hacerle más llevaderos sus días. Peter tiene una cosa en mente para Kate y Brad, por eso a su fallecimiento les deja una herencia muy particular, unos adorables perros, un viejo tocadiscos y convivir durante un mes en la que era su casa.
Kate es una joven emprendedora que ha montado su propio negocio, y aunque va prosperando poco a poco, aún tiene deudas pendientes y por eso se plantea aceptar las condiciones del anciano que se había ganado su corazón y, que al morir se ha llevado un pedacito con él.
Pero solo ha coincidido con Brad una vez y le ha parecido un tanto estirado, lo que le hace tener muchas dudas de si será posible tener una buena convivencia.
Brad es un joven que aun perteneciendo a una familia bien, trabaja en una empresa de juguetes y ha llegado a donde está por sus propios medios. Al contrario que Kate, cuando la conoce se siente completamente atraído por la pelirroja, así que para él no hay ningún problema en acatar el deseo de Peter y conocerla mejor.
Kate y Brad aceptarán las condiciones y empezarán a convivir en la casa que ambos conocen, al principio están un poco reticentes, sobre todo Kate, ya que son completamente diferentes, aunque según se van conociendo van bajando la guardia y ya se sabe, el roce hace el cariño. Sin embargo, ¿podrán salvar las diferencias que hay entre ellos?
Pues sí, Donna Kenci me ha vuelto a conquistar con esta historia que he leído en un pispás y que me ha hecho enamorarme de Kate y Brad.
Kate es una joven adorable que en sus ratos libres ayuda a las personas mayores. Es sencilla, dulce y cariñosa, aunque Brad al principio saca lo peor de ella. Sin embargo, solo le hace falta conocerlo un poco más a fondo para saber que debajo de esa fachada de estirado hay un gran hombre, aunque no quiere arriesgar su corazón porque después del mes de convivencia cada uno seguirá con su vida.
Brad vive para su trabajo y huye de las relaciones, hasta que conoce a Kate y empieza a replantearse sus convicciones, porque por su "pastel de calabaza" bien vale la pena intentarlo.
Secundarios hay bastantes, pero aparecen poco, aunque sí tienen bastante influencia en nuestros protagonistas. Yo destacaría a Peter, que aunque ha fallecido siempre está presente para ellos, por sus actos, sus deseos y lo que van conociendo de él.
Yo animo a Donna a que escriba la historia de algunos personajes que hay por ahí y así de paso saber más de Kate y Brad, jeje.
Ya comenté en la novela anterior que la autora tiene un estilo sencillo pero elegante, su forma de explicar las cosas es dulce y me encanta. La narración corre a cargo de ambos protagonistas, lo que nos hace conocerlos muy bien.
Un legado inesperado es una historia dulce, romántica y emotiva que me ha tenido enganchada a sus páginas desde el primer momento. Con una trama sencilla y original, y unos personajes complejos y entrañables, que me han hecho ponerme en su piel y sentir junto a ellos toda clase de emociones.
Esta es otra historia de las que seguro releeré de vez en cuando.
Peter Dawson está enfermo, pero desde hace más de un año cuenta con dos personas, que aunque no coinciden entre ellos, van a hacerle más llevaderos sus días. Peter tiene una cosa en mente para Kate y Brad, por eso a su fallecimiento les deja una herencia muy particular, unos adorables perros, un viejo tocadiscos y convivir durante un mes en la que era su casa.
Kate es una joven emprendedora que ha montado su propio negocio, y aunque va prosperando poco a poco, aún tiene deudas pendientes y por eso se plantea aceptar las condiciones del anciano que se había ganado su corazón y, que al morir se ha llevado un pedacito con él.
Pero solo ha coincidido con Brad una vez y le ha parecido un tanto estirado, lo que le hace tener muchas dudas de si será posible tener una buena convivencia.
Brad es un joven que aun perteneciendo a una familia bien, trabaja en una empresa de juguetes y ha llegado a donde está por sus propios medios. Al contrario que Kate, cuando la conoce se siente completamente atraído por la pelirroja, así que para él no hay ningún problema en acatar el deseo de Peter y conocerla mejor.
Kate y Brad aceptarán las condiciones y empezarán a convivir en la casa que ambos conocen, al principio están un poco reticentes, sobre todo Kate, ya que son completamente diferentes, aunque según se van conociendo van bajando la guardia y ya se sabe, el roce hace el cariño. Sin embargo, ¿podrán salvar las diferencias que hay entre ellos?
Pues sí, Donna Kenci me ha vuelto a conquistar con esta historia que he leído en un pispás y que me ha hecho enamorarme de Kate y Brad.
Kate es una joven adorable que en sus ratos libres ayuda a las personas mayores. Es sencilla, dulce y cariñosa, aunque Brad al principio saca lo peor de ella. Sin embargo, solo le hace falta conocerlo un poco más a fondo para saber que debajo de esa fachada de estirado hay un gran hombre, aunque no quiere arriesgar su corazón porque después del mes de convivencia cada uno seguirá con su vida.
Brad vive para su trabajo y huye de las relaciones, hasta que conoce a Kate y empieza a replantearse sus convicciones, porque por su "pastel de calabaza" bien vale la pena intentarlo.
Secundarios hay bastantes, pero aparecen poco, aunque sí tienen bastante influencia en nuestros protagonistas. Yo destacaría a Peter, que aunque ha fallecido siempre está presente para ellos, por sus actos, sus deseos y lo que van conociendo de él.
Yo animo a Donna a que escriba la historia de algunos personajes que hay por ahí y así de paso saber más de Kate y Brad, jeje.
Ya comenté en la novela anterior que la autora tiene un estilo sencillo pero elegante, su forma de explicar las cosas es dulce y me encanta. La narración corre a cargo de ambos protagonistas, lo que nos hace conocerlos muy bien.
Un legado inesperado es una historia dulce, romántica y emotiva que me ha tenido enganchada a sus páginas desde el primer momento. Con una trama sencilla y original, y unos personajes complejos y entrañables, que me han hecho ponerme en su piel y sentir junto a ellos toda clase de emociones.
Esta es otra historia de las que seguro releeré de vez en cuando.