Anteriormente solo había leído dos libros de esta autora y fue hace bastante tiempo, pero me hizo ilusión que publicaran algo nuevo de ella y además la sinopsis me dejó con muchas ganas de leerlo. Sí que es verdad que cuando vi lo pequeño que era el libro me quedé un poco a cuadros, pero he de decir que me ha parecido una historia preciosa, que me ha tocado el corazón y que me ha dejado un tanto perpleja, porque si algo tiene es que sorprende hasta el final. No le voy a poner un diez porque, para mi gusto, le han faltado un par de detalles, pero por lo demás se lo merece.

Como bien pone la sinopsis, Teagan está intentando superar su dolor, se ha mudado a una casa espectacular que acaba de reformar, está rodeada de un paisaje que invita a tener paz y tranquilidad, y ha hecho una buena amistad con sus vecinos Roxy y Mike.

Teagan tiene días que son llevaderos y otros en los que no tiene fuerzas para seguir, pero se vislumbra un poco de luz en su vida, cuando a la casa de al lado se muda un nuevo vecino.

Garrett es un afamado pintor y fotógrafo que acaba de comprar la casa de al lado de Teagan, esas vistas increíbles le servirán para inspirarse en sus obras, aunque cuando se cruza con su vecina sabe que ella será su nueva musa.

Garrett también carga con su propio dolor, y también está luchando por volver a sentirse vivo, ¿podrán ayudarse mutuamente? ¿Podrán reconstruir los pedazos de su corazón?

Preciosa es quedarse corta, o al menos a mí me ha cogido en un momento sensible y desde luego me lo ha parecido. Y cómo no, unos personajes espectaculares que me han tocado el corazón, he sufrido con ellos, pero también he ido de su mano cuando han ido avanzando poco a poco.

Teagan es una doctora que incluso estuvo en un reality, convirtiéndose en el médico de los famosos. Ahora trabaja en la nueva gama de productos que, Eva Cross (Crossfire) está sacando al mercado. Es una mujer dulce que lo está pasando realmente mal, se apoya en sus amigos, pero tiene días en que ni ellos son su consuelo. Por eso cuando Garrett aparece en su vida se convertirá en su pilar y se hará imprescindible para seguir en su día a día y empezar a superar el pasado.

Garrett es un amor, un hombre que deja a las mujeres con la boca abierta por lo sexi y guapo que es, pero él solo tiene ojos para una, porque en el momento en el que ve a Teagan, se hará con su corazón. Los dos están heridos, se necesitan para sanar y poco a poco se van convirtiendo en uno, y poco a poco también van abriendo sus corazones. Garrett es un torbellino en la vida de Teagan, entra en tromba y arrasa con todo, pero tiene una dulzura, además de paciencia y gestos muy románticos que me han hecho suspirar en más de una ocasión.

Como secundarios solo tenemos a Roxy, la vecina de ellos que se ha convertido en una buena amiga y compañera para Teagan, me ha encantado su comprensión y su buena intención para con ellos, igual que su marido Mike, una dulzura de hombre. También hay una breve aparición de Eva Cross, que ya lleva siete años de relación con nuestro amigo Gideon.

La autora juega muy bien sus cartas en esta novela, se sabe que a los dos les ha ocurrido algo gordo, no es hasta bien avanzada la historia en la que nos va dejando ver trazos de lo que fue en el caso de Garrett, sin embargo le cuesta más soltar prenda con Teagan, y llegamos al final y nos deja con la boca abierta.

Como he dicho al principio me ha parecido una historia preciosa que seguro voy a releer en más de una ocasión, pero lo que me ha faltado ha sido un buen epílogo y saber con más detalle lo que aconteció en el pasado, porque nos quedamos un poco en ascuas.

Un nuevo corazón es una novela preciosa, dura, emotiva y esperanzadora, una historia de dos personas a las que la vida les ha dado un duro golpe y están hechas pedazos, pero juntos encontrarán el apoyo y la comprensión que necesitan para ir avanzando paso a paso y poder unir las piezas de su nuevo corazón.