Primera novela de la saga Malory, una de las más famosas de Johanna Lindsey. Aquí se presentan a los componentes de la saga, algunos de los cuales aparecerán en sucesivas novelas.

Aquí la protagonista es Regina Ashton, sobrina de los Malory, hija de la única hermana de estos, y que falleció cuando Regina era muy pequeña. Después de la muerte de su hermana, los tíos se vuelcan en el cuidado de la sobrina como si fuera su propia hija. Regina tiene un carácter alegre, aventurero, demasiado independiente par la época, por eso se siente agobiada con esa sobreprotección que sus tíos ejercen sobre ella. Adora a todos sus tíos pero no quiere que interfieran tanto en sus asuntos, sobre todo a la hora de buscar un marido, ya que ninguno de los candidatos les parece lo suficientemente bueno para ella. Y no digamos Nicholas Eden, a pesar de lo mucho que se siente atraída Regina por él, ellos solamente lo aceptarán por las circunstancias sobrevenidas.

Nicholas Eden, conocido en todo Londres por esa gran fama de seductor, calavera y por su gran lista de amantes. Huye del matrimonio, por eso cuando surge el incidente con Regina y se acuerda la boda entre los dos, hará todo lo posible para que no se celebre, ya que en principio, solo ve a Regina como una amante. Sin embargo, esa forma de actuar que tiene es consecuencia de algo que el considera una gran mancha en su pasado que quiere ocultar y que a su parecer, le impide casarse con ella o con cualquier muchacha de noble linaje.

Otro aspecto muy importante es que aquí se presenta a los Malory, los tíos de Regina, que algunos de ellos serán los protagonistas de novelas posteriores. En primer lugar Jason, el más mayor y el más serio de los hermanos que ha velado de los demás miembros desde siempre; Edward hombre de negocios y padre de familia, tiene un carácter más afable que su hermano mayor, sin embargo intenta hacer las cosas con la mayor rectitud; James, la oveja negra de los Malory, abandonó a la familia y se embarcó para convertirse en pirata, es buscado por las autoridades y por último Tony, el menor de los hermanos, seductor y sinvergüenza pero de lo más encantador. Regina quiere a todos su tíos pero se puede decir que Tony es su favorito; se sentirá tan atraída por Nicholas, por lo mucho que le recuerda a aquel.

Escrita con sencillez pero a la vez con genialidad, lo que permite una lectura ágil, como sucede con un gran número de novelas de esta autora. En ella se nos muestra las costumbres de la alta sociedad inglesa de la época de la Regencia (los grandes bailes, las presentaciones en sociedad de las muchachas y las formas de buscar esposo, los compromisos matrimoniales, el sentido del escándalo y del decoro de esa clase social). Es una novela llena de momentos divertidos y momentos emotivos, sobre todo en la parte final. Su lectura no defrauda.