Por las opiniones que he visto, este libro no es muy popular entre las románticas, pero a mí me gusta mucho. Me encantan las novelas de reencuentros y esta no es una excepción.

Me gusta mucho todo lo que Grimm aguanta para que Jillian no se de cuenta que en realidad la quiere. Los celos que siente en el fondo y todo lo que tiene que hacer para que Jillian piense que la odia. Pero se nota que siempre ha estado enamorado de ella y cada vez que vuelvo a leer este libro siempre espero con el mismo entusiasmo el momento en que por fin él se deja llevar y le demuestra que la quiere.

Me gusta ese toque de fantasía que tiene el libro, que no llega a ser una novela paranormal en mi opinión, porque tiene más elementos de novela medieval que de paranormal.

Me gustan mucho las conversaciones que hay entre ellos y que casi siempre terminan en peleas. Y me hace mucha gracia que Jillian siempre piensa lo peor, y sin embargo lo que le pasa a Grimm es que se siente frustrado porque no puede dejarse llevar ya que si lo hace, cree que puede dañar a Jillian, por culpa del secreto que esconde.

Cómo seducir a un guerrero es uno de los libros que suelo releer con frecuencia y creo que puede gustar a las románticas que os gusten las historias medievales y con sentido del humor.

Yo le pongo un notable alto.

¡Gozo! ¡Alegría! Regocijaos, lectoras adictas al mundo de la fantasía, la magia, las leyendas y el romanticismo porque se ha escrito esta novela... Hacía tiempo que no me obsesionaba así con un libro. Lo empecé y no pude parar de leer hasta terminarlo..., y dicho esto, hablemos de lo más importante: la historia.

Gavrael McIllioch, (si algo hay que reconocerle a la Moning es que se curra los nombres de los personajes de sus novelas) es un guerrero honorable, pero también lleva dentro de si a una bestia. Una criatura espeluznante, un ser mitológico que solo se nombra en las leyendas, y que se apodera de su cuerpo y de su mente cuando menos se lo espera. El berserker que lleva dentro le asusta tanto como le repugna, pero lo que de verdad teme Gavrael (Grimm) es estar contagiado por la locura que controló a su padre y causó la muerte de su madre. Para mantenerse a salvo, y para mantener a salvo a la única persona que significa algo para él en el mundo, se ha convertido en un exiliado, un paria. Se ha apartado de Jillian St. Clair todo lo que ha podido, pero ahora el padre de ella le reclama. Tiene que presentarse en el castillo para hacer honor a una promesa.

Jillian ha estado enamorada de ese hombre salvaje y apuesto desde que lo encontró vagando por el bosque como una bestia herida hace ya quince años, y le ha odiado desde que un día sin motivo aparente él la rechazó y la abandonó cruelmente. Lo que Jillian no sabe es que su padre, desesperado al ver como su hija se mantiene alejada de los hombres y del amor, ha urdido una estratagema para encontrarle marido. Ha mandado llamar a tres apuestos highlanders para que uno de ellos la seduzca y derrita la fría capa tras la que se protege.

Si me gustó El beso del highlander y me enamoré de El highlander oscuro, Como seducir a un guerrero ha superado mis más locas expectativas y se ha convertido casi en mi favorito de esta autora (digo casi porque entre hombres como Dageous y Gavrael es difícil sino imposible elegir). La novela, que como siempre está muy bien narrada, tiene esos toques de humor que consideró necesarios para aliñar una buena historia, tiene pasión, tiene ternura, tiene desesperación (la de Jillian al ver como Grimm trata de evitarla y la de Grimm al ver que tiene al alcance de la mano el paraíso y no puede tocarlo por no comprender la esencia de lo que es él mismo), tiene magia y tiene mucho amor.

La relación entre Grimm y Jillian está marcada por el pasado. Grimm tiene miedo de hacer daño a Jillian y lucha por mantenerla apartada, y Jillian no entiende porqué Grimm no la permite acercarse ni la deja amarle. Sin duda una historia preciosa.

Es fundamental entender que en los libros de Karen Marie Moning tienen tanta importancia la relación entre los personajes como la magia y las leyendas sobre las que cimienta sus historias. Es una novela romántica-paranormal con todas las letras, y tienes que amar la fantasía para disfrutarla de manera completa, si no te va a gustar pero no vas a babear. De hecho lo único que me tiene algo perpleja con esta autora es su obsesión por las Highlands. Cierto que es un paraje mágico para ambientar cualquier historia, pero encuentro un tanto desconcertante su tendencia a mezclar todas las leyendas nórdicas y celtas, y entroncarlas a la tierra escocesa. Ya me pareció raro ver las leyendas irlandesas de los Tuatha adaptadas a la Escocia de Dageuos y Drustan, y ahora me ha chocado incluso más verla entrelazar a los dioses noruegos (Odin, Balder..) con esta tierra de nuevo.

Le doy un 5/5