Llevaba mucho tiempo sin leer a Ana F. Malory y en cuanto vi la portada y título de esta novela, me atrajo tanto que supe que tenía que ponerle remedio de inmediato.

El caballero de negro nos lleva a vivir una aventura divertida, apasionante y muy romántica que no deja indiferente.

En ella encontramos la historia de Daphne y Miles Evans.
Daphne viaja desde Inglaterra hasta Estados Unidos para pasar el verano con su tío. La temporada social londinense le es indiferente y prefiere vivir la aventura de conocer un lugar tan diferente a su hogar. Además, su padre la anima a irse para atrasar un compromiso tan pronto, así que Daphne lo tiene todo a favor para conocer aquel lejano lugar.

Nada más llegar Daphne se topará con un extraño y serio hombre que resulta ser muy amigo de su tío. Este hombre no es otro que Miles, que vive en Savannah alejado de todos los rumores que hace un tiempo surgieron de él y su vida amorosa.
Dispuesto a dedicar su vida exclusivamente a los negocios decide vivir allí junto a su amigo y vecino Edmund. Lo que Miles no espera es que aparezca la extrovertida sobrina de este y vuelva su mundo patas arriba ...

El caballero negro contiene una historia intensa muy interesante y corta, por lo que no puedo contar mucho más.
Lo que sí puedo añadir es que me ha encantado reencontrarme con la pluma de Ana de esta manera.

Me ha parecido una historia con una trama muy atrayente y atractiva. De las que atrapan desde el principio y el desarrollo es fascinante.
Además de parecerme una historia bastante original por su ambientación y progreso de la historia.

Daphne y Miles son dos personajes muy diferentes entre sí que la autora ha sabido complementar y crear entre ellos un equilibrio perfecto. Todo esto sin perder la esencia de cada personaje.

Sin duda es una historia de la que hubiera leído varias páginas más de lo que me ha gustado, aunque realmente no le falta detalle.
Sin duda es una novela muy buena que recomiendo leer a los seguidores del romance histórico.
Además, asegurar que Ana es una autora a la que tener muy en cuenta. Yo de momento pretendo no dejar pasar tanto tiempo para volver a leerla.