- Romántica histórica
- El soldado
El soldado
Detalles del libro
- Romántica histórica
Libro 2 de la Serie "Los planes del Duque"
Atormentado por las pesadillas de la guerra, Devlin St. Just, conde de Rosecroft, huye a su mansión de Yorkshire en busca de sosiego. Allí conoce a la pequeña Winnie y a su prima, Emmaline Farnum, quien está a cargo de la niña.
Emmie es hija bastarda de un noble, y se ha jurado a sí misma que jamás cometerá el mismo error que su madre. Por eso, cuando Devlin le propone formar juntos un hogar para Winnie, ella se muestra muy reticente. Y a pesar de que las decisiones que tomó en el pasado la obligarán a apartarse de su lado, Emmie se siente cada día más atraída por los besos del coronel. ¿Será capaz de resistirse a su encanto?
Opiniones de los usuarios
Devlin St. Just, nuestro héroe, ha recibido una propieda junto a un título de conde tras la muerte, a manos del propio Devlin, del anterior conde. Lo que el antiguo soldado, e hijo bastardo de un duque no espera es que con la propiedad también "herede" a una golfilla maleducada, Bronwyn. A la chiquilla la cuida Emmaline Farnum, una hermosa repostrera que vende sus creaciones para ganarse la vida.
Cuando los dos se conocen, se sienten atraídos el uno hacia el otro (esto pasa siempre, en todas las novelas, es inevitable), pero las circunstancias no ayudan a que den el paso y se conviertan en algo más que amigos, o empleador y empleada. Ella acepta vivir en la mansión, para estar así cerca de Bronwyn, quien se queda a vivir con Devlin. La niña es hija bastarda del fallecido conde, y su madre está muerta. Emmie es una prima lejana , y no quiere separase de ella.
El libro no cuenta con un argumento demasiado claro, salvo esto: protagonistas se conocen, hay una niña de por medio, y van surgiendo situaciones. Pero no es nada demasiado elaborado. Peca de falta de originalidad, pero nada más. Los personajes están bien definidos, hay coherencia en el desarrollo de la historia, y las páginas que tiene (394) son las justas. A mi parecer, no le sobran, pero tampoco le faltan. En cuanto a la ambientación, nada que destacar: transcurre casi por entero en tierras del condado heredado por Devlin, salvo cuando se va a casa de su padre.
Devlin St. Just me ha gustado como protagonista masculino. Es un antiguo soldado que participó en la famosa batalla de Waterloo, y oculta un secreto que le mantiene alejado de sí mismo. La lluvia, los truenos, los ruidos fuertes le asustan, y no ha terminado de asimilar del todo su pasado. Está atormentado, y solamente su hermano Valentine es testigo de sus recaídas. Pero entonces conoce a Emmie, y empieza a confiar en ella. Se muestra vulnerable, e incapaz de dejar el pasado atrás, pero es dulce y tierno, a la vez que apasionado.
Emmaline Farnum es una protagonista fuerte... a veces. La verdad es que se pasa la mitad de la novela llorando, es lo único que no me ha gustado de ella. Guarda un terrible secreto que, si sale a la uz, dañará a Bronwyn. Por eso no es capaz de contárselo a Devlin, ese atormentado aristócrata tan distinto a lo que ella se pensaba que ella (al principio, piensa que él es un bárbaro). La vida la ha castigado, pero ella es dulce y cariñosa, y siempre antepone a los demás a sus propias necesidades.
Como secundarios, destacaría a Valentine, el hermano pequeño de Devlin, y protagonista de "El pianista". Valentine se nos muestra como un joven atento, cariñoso y un virtuoso del piano. Estoy deseando leer su historia. Otra secundaria es la pequeña Bronwyn, que me ha parecido una niña muy temperamental, caprichosa y malcriada. Que su corta vida haya sido un cúmulo de pérdidas no le da derecho a portarse de forma tan caprichosa. No me ha gustado cómo ha pintado la autora a la niña. Y menciono también a Douglas, amigo de Gayle ("El heredero") y que s ehace amigo también de Devlin. Me gusta este personaje.
No hay más que añadir, salvo que es un libro que se deja leer, pese a la pesadez de la niña, siempre escapando y montando escenitas, y fácil de digerir. No hay grandes escenas, y el argumento no es de lo más original, pero eso me da igual.
Nota: 4/5.
El desgarrado espíritu del coronel Devlin St. Just llama a Emmaline Farnum, y en un acto de buena conciencia ella no puede rechazar su oferta de proporcionarle un hogar a la niña tan querida para el corazón de Emmie. A medida que los adultos forjan un camino hacia una vida mejor para la joven Winnie, Emmie es incapaz de resistirse al encanto de una profunda atracción hacia Devlin. Pero ella debe resistir, porque las decisiones tomadas hace años en su pasado la alejan inexorablemente del lado de Devlin.
OPINIÓN :
Este libro me llamaba bastante la atención , no sé porqué, ya que cuando intenté leer el primer libro de esta serie no fui capaz de llegar ni a la mitad, pero por testaruda, decidí leer la segunda entrega y por suerte este si lo he terminado.
Cuando Devlin St. Just primogénito, pero ilegítimo hijo de un duque llega a su nueva propiedad convertido en conde después de una excelente carrera militar, se encuentra con que su nueva posesión viene acompañada de una niña, que no es otra que la hija bastarda del anterior dueño y que tiene una lejana relación de parentesco con Devlin. Cuando la encuentra la niña está medio asilvestrada, y vaga a sus anchas por la propiedad contando sólo con la señorita Emmie que la cuida cuanto puede y que dice ser la prima de la pequeña.
Devlin aún lleva a cuestas su pasado militar, la guerra contra Napoleón donde perdió a dos de sus hermanos y donde ha visto más miseria y crueldades de las que una persona puede tolerar, tan poco tuvo una infancia sencilla, siendo hijo bastardo de un duque y abandonado por su madre a las puertas de éste cuando era muy pequeño. Pero viene con la esperanza y las ganas de recuperarse poco a poco y empezar una nueva vida. Encontrarse de repente al cuidado de una niña no lo asusta y además lo acoge casi de buena gana, pero insta a la señorita Emmie a que se mude temporalmente con ellos para cuidar de Winnie mientras no encuentran una institutriz.
Emmiline Farnum se muda para poder cuidar de la niña pero sabe que será sólo por un breve tiempo, ya que opina que lo mejor para Winnie, es que ella se mantenga alejada de su vida debido a la mala fama de todas las mujeres de su familia. Vive en una pequeña casita donde trabaja como pastelera, pero se mantiene alejada del resto de lugareños con una vida bastante solitaria.
Emmie y Devlin se gustan casi desde el principio, aunque se van conociendo poco a poco mientras cuidan de Winnie e intentan darle una educación y la seguridad que le ha faltado durante toda su vida. Emmie ayuda a Devlin con sus pequeños demonios, es una mujer cariñosa y amable, pero que esconde un gran secreto por el que sabe que no podrá quedarse mucho tiempo al lado de las dos personas más importantes para ella.
Devlin por su parte, pese al cariño y el deseo que siente por Emmie, tan poco se cree merecedor de ella ,aunque es un hombre paciente, amable y cariñoso tanto con Emmie como con Winnie, un hombre que ha sufrido pero que sabe dar cariño y amor sin oponer mucha resistencia.
En general es un libro que está bien, pero nada más, una historia simple, sin pretensiones que si no lees el primer libro puede provocar un caos mental entre parientes de unos y otros que salen en ambos libros y que es una historia que en mi opinión, tiene demasiada paja, muchas páginas que sobran haciendo que la última mitad del libro se haga lenta. Aún así le doy un bueno, porque como dije, es sencilla y entretiene sino buscas una gran historia.