Cuando leí Un coronel para Lady Briana me quedé con las ganas de conocer la historia de El capitán Kirk y Lady Elisabeth, ya que Verónica nos iba dejando caer escenas de esta pareja que prometían, además del epílogo, que ya dejaba ver que lo íbamos a pasar pero que muy bien. Por fin he tenido el gusto de leer esta maravillosa historia, y ahora solo puedo decir que ya espero ansiosa que lleguen pronto Ryan y Olivia.

Cuando volvieron de la guerra los tres amigos, Kirk, Frederick y Ryan, todos volvieron tocados, unos físicamente y otros mentalmente. Este es el caso de nuestro capitán, al que todos temen por su carácter arisco y por el semblante tan temible que siempre lleva.

Lady Elisabeth, a la que conocimos bastante en la anterior entrega, ya que es la mejor amiga de Briana, lleva ya varias temporadas sin tener proposiciones matrimoniales. Su madre se ha empeñado en que esta sea la definitiva y que acepte cualquier marido que se preste. Sin embargo, ella siempre ha soñado con lord Perth, aunque éste nunca la ha mirado ni se ha dirigido a ella.

Pero justo entonces el lord cambia su actitud hacia ella y pide su mano, ella encantada de que al fin podrá casarse y hará su sueño realidad. Aunque cuando lo va conociendo se siente cada vez más desencantada y con ganas de aislarse y vivir su soltería con lo que de verdad le gusta, el trabajo en el campo.

Una escapada hará que deje de estar prometida con Perth y acabe estándolo con el duque de Kensington, un hombre que le da un poco de miedo, pero que también le hace sentir mariposas en el estómago, aunque este no está por la labor de casarse.

¿Podrá Elisabeth derribar la coraza que ha erigido a su alrededor el duque?

Me ha gustado esta historia tanto o más que la anterior, aunque en esta ocasión no me he reído a carcajadas como con Briana, pero también me lo he pasado muy bien.

Elisabeth es una joven decidida a pasar de encontrar marido y dedicarse a las tareas del campo, algo que siempre le ha gustado, pero que no está bien visto en la sociedad en la que vive.

Durante años ha suspirado por un hombre que rápidamente cae de su pedestal, y en un momento dado encuentra ayuda en el duque demente. Pero este acabará por volverla loca, porque es un poco como el perro del hortelano, que ni come ni deja comer.

Me ha gustado mucho su carácter, es decidida, impulsiva, emprendedora y valiente, no duda en enfrentarse a la sociedad y hacer lo que realmente quiere, cuando su madre no mete baza, claro está.

Kirk, conocido como "el duque demente" por su mal carácter y lo distante que es, ha vuelto traumatizado de una guerra cruel, sus pesadillas le asustan y teme causar dolor. Aunque desde hace cuatro años que su corazón está ocupado por una jovencita rebelde, y que le pone los nervios de punta, no tiene pensado casarse, y hará todo lo que esté en su mano para evitarlo, aunque tampoco le hace ninguna gracia ver moscardones alrededor de ella.

Me ha gustado ver cómo van cayendo sus barreras, una a una, y lo que le cuesta hablar de sentimientos, pero con Elisabeth ha dado con la horma de su zapato y no se lo pondrá nada fácil.

Como secundarios tenemos prácticamente los mismos que en el libro anterior, además los dos suceden simultáneamente. Por eso nos vamos a encontrar escenas que entonces pasaron de soslayo y ahora sabemos que ocurrió realmente.

Me ha gustado la participación de Ryan y el jaleo que se lleva con Olivia, pero sobre todo la de Ángela y Monty. Ángela es un personaje que ya me encantó, y es que hay que adorarla, ya que es una simpática y temible metomentodo que siempre ayuda a los que quiere y si es necesario les da el empujoncito que les hace falta, y con Monty me he reído mucho porque a veces se hace el tonto la mar de bien.

El estilo de la autora me gusta mucho, es sencillo, directo y de fácil lectura, con diálogos divertidos y buena ambientación de la época.

Un capitán para Lady Elisabeth es una bonita historia, amena, fresca, divertida en ocasiones y emotiva también. Con unos personajes de carácter fuerte, cabezotas y que aunque mantienen un constante tira y afloja, se complementan a la perfección. Además los acompañan un gran elenco de secundarios que los fortalecen.

Esta es la siguiente entrega de “Soldados valerosos” y las vivencias de Lady Elizabeth y el capitán Kirk Baldrick. La historia corre, más o menos, paralela a la de Frederick y Lady Briana, por lo que aparecen todos los personajes de la serie, que son unos estupendos secundarios.

Esta historia, además de graciosa y contada con sentido del humor, es un poco más intensa. Esto se debe al capitán Kirk. Un hombre con un oscuro pasado, que conocemos a lo largo del libro y unas vivencias en la guerra contra Napoleon, que le han marcado, en extremos y, junto al carácter serio y taciturno, le ha hecho convertirse en un ser gruñón y poco educado, que trata a todo el mundo con desprecio.

Esto es algo que aterrorizará, en un principio a Elizabeth, pero que, conforme lo va conociendo y, enamorándose de él, dejará de importarle. Él la ama, pero teme por su seguridad si le pide matrimonio, por lo que hará un montón de inconveniencias que lo único que conseguirán será, alejarla de él.

Cuando esto sucede, Kirk, se derrumba y empieza a elucubrar el modo de que ella le persone. Sólo con ayuda de la cuñada de Briana y con los consejos que le propone, se presenta ante ella, exponiendo sus razones para el matrimonio. No lo tiene muy claro, pero confía en que ella siga amándolo.

La trama, te atrapa, sobre todo a partir de la segunda mitad y, se vuelve adictiva en cierto momento, que lo único que quieres es saber como se desarrollarán todos los problemas que existen entre los dos.

Es una bonita historia, con unos diálogos simpáticos y con doble intención, sensual, con personajes bien creados y una trayectoria, siempre hacía arriba, por lo que su lectura se hace muy agradable. A mí, me ha gustado más que la primera y, termina con un epilogo que te deja con ganas de leer la siguiente entrega, porque deja interrogantes que prometen una bonita y entretenida historia.

Si te gusta evadirte de la monotonía y reírte, además de soñar... te lo recomiendo.

Cuando leí Un coronel para Lady Briana, supe que no iba a despegarse de estos personajes que prometían tanto.

En esa novela ya conocimos algunas pinceladas de lo que nos esperaría en esta novela ya que los personajes protagonistas de Un capitán para Lady Elizabeth aparecen allí y ya la autora nos muestra algo de su peculiar y apasionante historia.

Elizabeth es amiga de Briana, protagonista de la novela anterior, y el capitán Kirk forma junto con dos compañeros de guerra, un trío bastante llamativo y singular.

Los tres han vuelto de la batalla con alguna que otra imperfección, ya sea físico o mental. En el caso de nuestro capitán kirk, apodado como "el duque demente" por la sociedad que les rodea y a la cual pertenece, es fácil averiguar qué problema trajo consigo...

La historia que une a Elizabeth y Kirk es magnífica. Yo al menos la he disfrutado muchísimo, era una historia muy esperada y no me ha defraudado en absoluto, más bien lo contrario.

Es muy diferente a la historia de Briana y es algo que me encanta todavía más. Esta historia me parece más intensa que la anterior, algo que demuestra el camaleónico estilo de la pluma de la autora a la hora de crear historias relacionadas y tan diferentes entre sí.

Elizabeth y Kirk son dos personajes que el destino une de una manera inesperada. Entre ellos surgen desde pronto más que chispas, y en forma de tira y afloja, sentimientos encontrados y lucha de voluntades seremos testigos de su historia.

Beth tiene muy claro lo que quiere en su vida y Kirk lucha con sus fantasmas y en lo último en lo que piensa es en formar una familia ni estar con una mujer.

Son dos personajes a la altura uno del otro. La horma de su zapato el uno del otro. Y eso es bueno en algunas ocasiones pero en otras no tanto, ya que ha conseguido que quiera zarandearlos alguna que otra vez por la cabezonería y forma de actuar de uno y otro en ciertos momentos.

La historia me ha parecido muy pasional, con una trama que no decae en ningún momento más va in crescendo, pienso que la trama contiene giros inesperados que hacen que no puedas despegarte de la historia de principio a fin. Por lo que me han entretenido y sorprendido mucho.

Los personajes secundarios en la trama son bastante importantes, al pertenecer a una serie ambas historias están relacionadas.

La primera novela y esta transcurren casi en el mismo tiempo cronológico, así que me ha parecido muy acertada el modo en el que la autora entrelaza las diferentes historias conociendo de diferentes puntos de vista situaciones que aparecen en el primer libro. También me ha encantado reencontrarme con personajes que se conocí en la novela anterior además de tener muchas ganas de leer la siguiente novela, parece que Olivia nos va a sorprender bastante.

Así que no me queda más que recomendar la novela a las amantes del género histórico ya que no tiene desperdicio.