No sé si alguna de vosotras no ha leído este libro pero de todos modos creo que una autora como Julie Garwood merece mención en cada uno de sus libros. Además, por si alguna no conoce a esta autora bien está contar con alguna crítica para hacerse una idea, ¿verdad? Así pues, aquí os dejo la mía...

Lady Johanna, una indómita inglesa, está resuelta a luchar por su libertad en la Inglaterra del 1200, un mundo dominado por hombres. Al enviudar a los dieciséis años de edad, Johanna se prometió que jamás volvería a casarse. El rey Juan tenía sus propios motivos para desear que la joven se casara nuevamente con el novio que él había escogido. Pero el barón Nicholas, hermano adoptivo de la joven, encontró una salida para Johanna: que contrajera matrimonio con Gabriel MacBain, el poderoso guerrero que administraba las propiedades escocesas de ella. Sin otra salida, la joven acepta este matrimonio y la ternura y paciencia del apuesto MacBain van haciendo que florezca un amor como el que nunca había soñado...

Lady Johanna es joven pero ya sabe lo que es la humillación y el dolor. Su personalidad ha quedado marcada por el pasado duro que le ha tocado vivir. Cuando llega a Escocia sus expectativas son cuasi nulas ya que no puede concebir un matrimonio agradable teniendo que haber hombres de por medio. Pero el laird MacBain la trata con dulzura a pesar de su fuerza y de su terrible expresión. Además, su nombre es Gabriel... el protector de las mujeres y los niños.

Gabriel MacBain no cree que la mujer que tiene ante sus ojos sea capaz de sobrevivir en las Highlands escocesas y se propone protegerla de todo y de todos. Es un hombre duro, curtido por numerosas batallas y atrapado en la lucha interna de su propio clan ya que ha tomado bajo su protección a un clan sin tierras, los Maclaurin. El desea la unidad de ambos clanes pero parece que sus respectivos miembros no están por la labor.

La relación entre Johanna y Gabriel es muy muy tierna. Ambos luchan contra los miedos de ella: él con su paciencia y su dulzura; ella con su obstinación y voluntad. Poco a poco su relación se va estabilizando hasta que ambos comprenden que el amor les hará más fuertes y capaces de enfrentarse a cualquier cosa.

Este libro tiene también situaciones bastante singulares con cierto toque de humor muy característico de las novelas de Garwood ambientadas en Escocia. Los personajes, tanto los principales como los secundarios, están muy trabajados y se hacen entrañables.

En resumidas cuentas, este libro no tiene desperdicio. Es uno de mis preferidos de esta mujer.