Judith es la segunda hija de un matrimonio que está atravesando por unos momentos difíciles, como consecuencia de las deudas del hijo mayor. Digo segunda hija, pues es la segunda chica, pero realmente es la tercera. Detrás de ella hay otra hermana. Los padres, un clérigo y su madre, deciden pedir ayuda a una tía de la familia que tuvo suerte en hacer un matrimonio con un Baronet. Aceptan el que una de las hijas sea enviada a la casa, donde realizará tareas domésticas o de dama de compañía, pero gratis.
En el viaje a la casa de los tíos, el carruaje sufre un percance y ahí empiezan todos los “problemas” de nuestra protagonista.
Lord Rannulf Bedwyn viaja a casa de su abuela, pues esta quiere presentarle a una nueva prometida… La señora está enferma de gravedad y quiere ver a su nieto casado. Es otro de los famosos hermanos Bedwyn.
En el camino se encuentra a Judith y decide rescatarla. Cuando se presentan los dos adoptan nombres falsos. Ella como Claire Campbell, una actriz de teatro. Y el modifica su nombre, para que no sepa que es un caballero rico. Pasan dos días en una posada y Judith no duda un momento en aprovechar la ocasión y entregarse a él. Disfrutan los dos, pero todo se acaba, cuando el decide que quiere acompañarla a su casa. Entonces ella consigue huir y llegar a casa de sus tíos.
Allí es una mujer desdichada. Su tía la ve como una posible competencia hacia su hija y decide deformarle los vestidos, ocultarle su precioso pelo color zanahoria… etc. Lo que no sabe es que su tía está empeñada en que Julianne, su prima, consiga como marido a Lord Bedwyn, que no es otro que Ralh..
Cuando se ven, ninguno de los dos da crédito a lo que están viendo. El se tortura pensando en lo mal que lo debe estar pasando; también está preocupado por si se ha quedado embarazada y demás.
A todo esto enrollo se une el hermano de judith, el causante de todos los problemas y el primo de Judith que es un bala perdida. También hará sufrir a la protagonista.
A causa de un robo, del cual culpan a Judith, esta huye de la casa de sus tíos, pero Lord Bedwyn la recoge y se la lleva a su casa.
El resto hay que descubrirlo leyéndolo.

Me ha gustado el libro. Tal vez no tanto como simplemente enamorados, o momentos inolvidables, pero está bien. Este me ha resultado algo más lento. Tal vez porque transcurre en el campo. Las acciones de la tía y la prima me superaban. Pues eran verdaderamente malas. Y él que ella se dejara hacer, en vez de responder tampoco ayudaba mucho, la verdad.
Pero el personaje de Rannulf Bedwyn si que me ha gustado. Es un hombre con una personalidad muy fuerte, sabe lo que quiere y va a por ello. Incluso complace a su moribunda abuela. Me parece algo muy tierno.

Un libro que os recomiendo si sois seguidoras de la saga Bedwyn