2º Los Gresham

Tatiana Elisabeta Smirnova tiene una vida de cuento de hadas; es la princesa y heredera del reino de Orlovenia. Como el de todo miembro de la realeza, su destino está en manos de otros. En breve contraerá matrimonio con el joven escogido por su padre, el apuesto Sergei Barlov y en no mucho tiempo, pues el rey Iván Smirnov está gravemente enfermo, se convertirá en la nueva reina de Orlovenia.
Tatiana ama a su pueblo, sabe cuál es su deber, de modo que está preparada. Sin embargo, poco antes de que los esponsales se celebren, tiene lugar un golpe de estado y el rey es asesinado.

Para evitar su muerte, es ayudada a escapar por su aya, el consejero de su padre y el jefe del ejército real. Así, Tatiana comienza una huida con destino incierto y acaba recorriendo diferentes países de Europa, perseguida por los enemigos de su reino, que codician el poder y su reino.

Con sólo un puñado de joyas y la voluntad de sobrevivir, acaba recayendo en el puerto de Londres, a bordo del Discordia, barco de la compañía naviera de los Gresham.
Disfrazada como un muchacho es sorprendida en la bodega, pero logra huir. Sin embargo las desventuras de la princesa no han acabado aún. En cierto modo apenas acaban de empezar.
Para sobrevivir se ve obligada a robar y su víctima, un caballero de la nobleza, resulta ser nada más y nada menos que el barón de Winter, Darel Gresham, el capitán del Discordia.

Aguijoneado en su orgullo, tras una noche aciaga, Darel jura que encontrará a la ladrona que le ha robado su caballo y, sobre todo, el alfiler que le regaló su difunto padre antes de morir. Lo que no se imagina es quién es realmente su némesis y que bajo la ropa mugrienta de la ladronzuela se esconde, en realidad, toda una princesa... de armas tomar.

Durante gran parte de la lectura, de la que es la segunda novela de Los Gresham, nos percatamos que, en realidad, La bahía de la escocesa y Reinar en tu corazón son paralelas en el tiempo. Es decir que mientras tenía lugar la historia de Christopher y Kimberly, también germinaba la de Darel y Tatiana.
A mí es algo que, con toda sinceridad, me gusta. Es muy interesante leer desde dos puntos de vista. Es decir, en La bahía de la escocesa vivimos algunas escenas en la piel de Chris y Kim; en Reinar en tu corazón lo hacemos desde la perspectiva de Darel, sobre todo.

Pero además... ¿qué encontramos en las páginas de Reinar en tu corazón?

A mí me ha dejado esa sensación que me dejaban las novelas de los años 80 y los 90: una historia de aventuras, de encuentros, desencuentros, de malos entendidos, subterfugios, secretos, celos y desconfianza.
Una novela donde los diálogos son afilados y son el arma más punzante y más letal, donde las escenas de sexo son más bien pocas pero suficientes.

Es una historia de amor que nace mientras se suceden los duelos verbales entre Darel y Tatiana, donde la seducción se teje poco a poco. Porque a la fin, no estás ante nada más que un libertino que trata de seducir a la, en apariencia, pobre fregona, sin saber que está ante una princesa.

Pero junto a la pareja protagonista, a la largo de la lectura, conocemos a un amplísimo plantel de personajes. Comenzando por los habitantes de Orlovenia, desde el rey Iván Smirnov, Vasili Fedorov, a la aya Fedora, al leal consejero Kirov, junto a los enemigos del reino (que obviamente no desvelaré). Continuando por los diferentes personajes que Tatiana encuentra en su camino, como Anna la Galesa o al personal de servicio de Lord Winter, Cornelio, la señora Templance o Jenny. Y terminando con toda la familia Gresham.

Todo ello, reitero, propicia un sinfín de aventuras, encuentros y desencuentros, mientras Tatiana es perseguida muy de cerca por los asesinos de su padre y Darel, por su parte, acaba involucrado en algún que otro peligro; y mientras la atracción surge entre esta pareja, en apariencia, no muy bien avenida.
Así nace la historia de amor de Darel Gresham y Tatiana Elisabeta Smirnova.
Una historia donde una princesa se ve obligada a huir de su reino, donde un calavera se cruza en su camino sin proponérselo, pero una vez se presenta la oportunidad, hace suya la misión de protegerla y, cómo no, seducir a la muchacha.

Una historia que te transporta desde un reino asediado, Orlovenia, a Londres y al hogar de los Gresham.

Una historia que no decae en ningún momento, pues las aventuras, persecuciones y pericias de sus protagonistas no lo permiten.

Y también... una historia de amor de las "de antes", donde lo que lees, lo que vives, es nada más que cómo el calavera acecha, seduce y corteja a la inocente dama, sin saber, por cierto, que ha encontrado la horma de su zapato. Nada menos que la princesa del reino de Orlovenia.

Reinar en tu corazón es una novela romántica histórica de La Regencia que, creo, se sale un poco de los cánones, pues se desarrolla lejos de salones de baile y del mercado matrimonial. En su lugar donde priman la aventura, el honor, la venganza, el amor... y, claro está, el carácter irreverente de una familia muy peculiar: los Gresham.