Detalle de la opinión
4.5 3 0.5Una lectura recomendable
Valoración
5.0
Llevo muchos años leyendo a Johanna Lindsey y cada nuevo libro suyo lo espero con ilusión. En cuanto supe de esta nueva novela, me decidí a leerlo, apenas sin leer la sinopsis.
Cuando empecé su lectura me di cuenta que el protagonista era de la familia Callahan, justo el hermano del protagonista de Un corazón por conquistar y también ligado a Corazón fugitivo con el pistolero Degan, amigo de la familia, el cual también aparece ligeramente en Te amaré hasta el amanecer. De todas formas, puede leerse independientemente.
La trama de esta novela es bastante sencilla y lineal. Violet, como dice la sinopsis, vuelve de Inglaterra, donde lleva viviendo nueve años, para un corto periodo, piensa ella. Ya tiene localizado al lord con el que quiere casarse y su viaje tiene que ser rápido para solucionar el problema de su familia y volver a tiempo para la temporada londinense y su posible boda.
Al llegar a Montana, se ve raptada por un hombre al que llaman Callahan y que no es otro que el socio de su padre en una mina de plata, cuyo emplazamiento es desconocido para evitar el robo de un hombre desaprensivo que quiere hacerse con ella, sin importarle por qué medios.
Se encuentra, de pronto, en un campamento donde todo es completamente rudimentario, lo que la insta a enfrentarse a su raptor con muy malos humos. Pero, pese a tanto salvajismo, ella paso a paso va descubriendo a ese hombre que ha cuidado de su padre y que le ha ayudado a sacar una fortuna en plata.
Me ha gustado el desarrollo de la historia. Lo que más me ha llamado la atención es el cambio de Morgan y Violet, tan sumamente diferentes y que parece que se han invertido sus sentimientos y formas de pensar. Morgan, de tan salvaje y mal encarado, se va convirtiendo en una persona amigable y compasiva, sacando su verdadero carácter humano. Violet, de la refinada señorita de sociedad, va aprendiendo a disfrutar con la calma y paisajes de la zona, con un día tranquilo de pesca, con la vista de un amanecer entre las montañas... Hay un cambio radical entre ellos, lo que los lleva a mirar el futuro, tanto él como ella, con alguna posibilidad.
Es una novela que tiene un poco de todo: aventuras, bandidos asesinos, búsqueda de tesoro escondido, sorpresas que no te esperas y un malvado que no duda en asesinar para conseguir sus fines.
Personajes secundarios importantes que destaquen hay pocos, entre ellos Texas, amigo de Morgan y el padre de Violet, son los que más me han gustado.
La mayor parte de la novela se centra en la relación de los dos protagonistas, con sus batallas dialécticas, sus tira y afloja, con unos diálogos muy divertidos, como acostumbra Johanna Lindsey y el relato de una historia de amor bonita y que resulta, a la vez, divertida, tierna y sensual.
Una lectura recomendable para todos los amantes de los libros de Johanna Lindsey.
Cuando empecé su lectura me di cuenta que el protagonista era de la familia Callahan, justo el hermano del protagonista de Un corazón por conquistar y también ligado a Corazón fugitivo con el pistolero Degan, amigo de la familia, el cual también aparece ligeramente en Te amaré hasta el amanecer. De todas formas, puede leerse independientemente.
La trama de esta novela es bastante sencilla y lineal. Violet, como dice la sinopsis, vuelve de Inglaterra, donde lleva viviendo nueve años, para un corto periodo, piensa ella. Ya tiene localizado al lord con el que quiere casarse y su viaje tiene que ser rápido para solucionar el problema de su familia y volver a tiempo para la temporada londinense y su posible boda.
Al llegar a Montana, se ve raptada por un hombre al que llaman Callahan y que no es otro que el socio de su padre en una mina de plata, cuyo emplazamiento es desconocido para evitar el robo de un hombre desaprensivo que quiere hacerse con ella, sin importarle por qué medios.
Se encuentra, de pronto, en un campamento donde todo es completamente rudimentario, lo que la insta a enfrentarse a su raptor con muy malos humos. Pero, pese a tanto salvajismo, ella paso a paso va descubriendo a ese hombre que ha cuidado de su padre y que le ha ayudado a sacar una fortuna en plata.
Me ha gustado el desarrollo de la historia. Lo que más me ha llamado la atención es el cambio de Morgan y Violet, tan sumamente diferentes y que parece que se han invertido sus sentimientos y formas de pensar. Morgan, de tan salvaje y mal encarado, se va convirtiendo en una persona amigable y compasiva, sacando su verdadero carácter humano. Violet, de la refinada señorita de sociedad, va aprendiendo a disfrutar con la calma y paisajes de la zona, con un día tranquilo de pesca, con la vista de un amanecer entre las montañas... Hay un cambio radical entre ellos, lo que los lleva a mirar el futuro, tanto él como ella, con alguna posibilidad.
Es una novela que tiene un poco de todo: aventuras, bandidos asesinos, búsqueda de tesoro escondido, sorpresas que no te esperas y un malvado que no duda en asesinar para conseguir sus fines.
Personajes secundarios importantes que destaquen hay pocos, entre ellos Texas, amigo de Morgan y el padre de Violet, son los que más me han gustado.
La mayor parte de la novela se centra en la relación de los dos protagonistas, con sus batallas dialécticas, sus tira y afloja, con unos diálogos muy divertidos, como acostumbra Johanna Lindsey y el relato de una historia de amor bonita y que resulta, a la vez, divertida, tierna y sensual.
Una lectura recomendable para todos los amantes de los libros de Johanna Lindsey.