- Romántica histórica
- Un hombre sin pasado
Un hombre sin pasado
Detalles del libro
- Romántica histórica
La pasión que él despierta en ella es más fuerte que las estrictas reglas de su comunidad.
En una remota comunidad puritana, en Montana, Rachel Yoder sobrelleva en silencio el injusto asesinato de su buen marido. Su vida transcurre despacio, entre el austero rigor de las costumbres de la comunidad y unas soterradas ansias de libertad y pasión, hasta que la imprevista llegada de un impetuoso forastero cambia su existencia para siempre.
Se llama Cain y está herido. Es fuerte, hermoso... y un asesino. Rachel sabe que no debería acercarse a él, pero no puede resistir la tentación de introducirlo en sus fantasías. Y en sus planes de venganza.
Opiniones de los usuarios
La relación de los protagonistas está muy vinculada con la religión y, por lo tanto, alude a citas o pasajes bíblicos que ponen en la picota la forma de actuar de ambos, incluso del resto de los personajes. A la misma vez vamos conociendo otras historias secundarias que enriquecen la narración, historias todas ellas muy crudas que no te dan tregua en la lectura para tomar un respiro.
La única pega que le pongo es el desenlace, que me ha resultado demasiado efectista para una historia ya de por sí recargada de mensaje. En mi opinión, el final ha sido como darle una vuelta de tuerca al desenlace.
Un hombre sin pasado es una historia ambivalente, que lo mismo te calienta el corazón y te enternece los sentidos que te rompe el alma pero, sobre todo, es un libro memorable.
Mi valoración es de... muy buena.
Entonces aparece el forastero herido. Se llama Cain, es hermoso y fuerte…y sobre todo, es un pistolero. Rachel no puede resistir la tentación de introducirle en su vida más oculta, la que conformar sus sueños y sus ansias de venganza, y esa pasión es más fuerte que las reglas de la comunidad.
Otra historia maravillosa, de esta magnífica escritora (realmente es una pena que no hayan publicado más libros suyos en español), que al igual que en sus otros libros, es difícil, y diferente a lo que podemos estar acostumbradas.
Para empezar, los personajes no podrían ser más diferentes, como el día y la noche, el agua y el aceite.
Rachel vive con su hijo en una comunidad amish. Hace un año que perdió a su marido, asesinado por un poderoso terrateniente. Su vida se centra en cuidar de su hijo, sacar adelante su granja, ir a misa los domingos…es una persona que sigue rigurosamente las normas de su comunidad, ni siquiera es capaz de expresar el odio que siente por el hombre que asesinó a su esposo.
Un día aparece un forastero gravemente herido y ella, no puede hacer otra cosa que acogerle en su casa y tratar de salvarle la vida.
El forastero se llama Cain y es un pistolero. Él no conoce el lado amable de la vida. Lo suyo son la violencia y las armas. Incluso en la casa de Rachel se muestra desconfiado y en alerta, es incapaz de alejarse de sus armas.
Tras su recuperación, Rachel contrata a Cain para ayudarla con la granja mientras se va recuperando, y ésta acaba contratándole para que lo haga durante el resto del verano.
Y no sólo ayuda a Rachel con la granja, sino también con su hijo. A su lado el niño parece salir poco a poco de su caparazón, se siente más confiado y seguro de sí mismo, y eso es algo que la protagonista agradece profundamente.
Los demás miembros de la comunidad no ven con buenos ojos que Cain permanezca en su comunidad y en casa de Rachel. Se muestran desconfiados e incluso descorteses. Para ellos su presencia no es buena, y creen que sólo puede atraer problemas, incluso después de que él los “salvara” de una situación complicada. Él y su aura de violencia sólo les traerán más violencia. Llegan a culpar de sus pecados a Cain, su presencia es maligna.
La verdad que los miembros de la comunidad sacan de quicio. Me parecieron una pandilla de beatos, que lo daban todo por sus normas pero que en realidad no son capaces de cumplirlas. Gente que se aleja del pecado para no sucumbir en él. Especialmente cogí manía Noah, viudo perteneciente a la comunidad, gran amigo del difunto esposo de Rachel, y que se cree que puede ocupar su lugar, que tiene todo el derecho, y tiene la firme creencia de que Rachel será su esposa.
La historia transcurre lentamente (a quien le guste un desarrollo ligero quizá pueda aburrirse un poco), las cosas no suceden de repente. Rachel y Cain no se enamoran a primera vista. Poco a poco se van conociendo, y parece que entre ellos existe una guerra de voluntades. Rachel trata de demostrar a Cain que la bondad existe, así como el perdón, y la posibilidad de vivir en paz. Rachel que es toda una santurrona, y Cain…que hasta su nombre hace referencia al pecado.
Desde luego quien espere algo parecido a un flechazo o pasión desbordada, no lo encontrará en este libro. Emociones y pasión contenida, miradas y anhelos, un amor imposible es lo que esta historia revela. Pero en mi opinión eso no lo hace menos intenso. De hecho, a mi me mantuvo en tensión. Ambos sabían que se deseaban, pero ninguno se acercaba al otro, una por miedo, otro por respeto.
El final, y eso debo advertirlo, me resultó un poco decepcionante. No sé…no es como hubiera esperado. No es que sea un mal final, es que es…un poco flojo, como si la escritora lo hubiera escrito deprisa para acabar la novela de una vez. En mi opinión la autora podría haberlo resuelto de otra forma.
De todas formas, creo sinceramente que es un libro que merece la pena leer. A mí desde luego me emocionó mucho y a punto estuve de soltar la lagrimita.
Y para las que hayáis visto la película, deciros que como suele ocurrir, el libro es muchísimo mejor.
Valoración: 4 de 5