Detalle de la opinión
4.5 1 0.5Un libro muy recomendable
Valoración
4.5
Conociendo ya la pluma de Pilar Cabero, al empezar Un refugio perfecto sabía que iba a leer un buen libro, y efectivamente, no me he engañado. Me he encontrado con una historia maravillosa, narrada con una prosa elegante y rica en vocabulario, que retrata una época y un lugar a la perfección.
La protagonista, Elisa, encuentra en Joseph y su acogedora familia un refugio en el que esperar su huida definitiva de España. Allí, por primera vez sentirá lo que es una familia que se ama y se respeta. Su choque es brutal al principio. No entiende las chanzas que se sueltan entre ellos y el cariño que sienten todos por todos. Ella ha vivido desde los seis años, cuando murió su madre, en una casa donde se ha abusado de ella, la han maltratado y la han odiado; por lo tanto, le cuesta habituarse a compartir ese buen ambiente que existe en la familia Arana. Van pasando las semanas y se va sintiendo parte de ellos, al mismo tiempo que se va enamorando de Joseph y de sus dos hijos.
Por otra parte, el protagonista, Joseph, aún siente la falta de su esposa y culpa al destino de su muerte, aunque empieza a sentirse atraído por la dulzura de Elisa, la cual se va ganando el corazón de todos, pero sobre todo de Yñigo, el pequeño hijo de Joseph. Se siente culpable por desear algo que no debería, pero la pasión es más fuerte que él.
Me ha encantado la relación amorosa. Un amor que empieza despacio, y con el paso del tiempo va creciendo y aumentado su poder. Las expresiones de ternura, el cariño que los envuelve, las chispas que saltan cuando están juntos, lo que tratan de evitar y no consiguen, los remordimientos y todo ese sufrimiento/felicidad que sienten los que se enamoran…
En cuanto a la ambientación, me ha parecido perfecta. Todas las descripciones que nos enseña cómo se vive en un caserío de los montes cercanos a San Sebastian, sus costumbres, sus hábitos, su forma de trabajar y sus momentos de ocio. Una época, donde los lutos eran eternos, se circulaba andando o a caballo, además ir en carro. Un tiempo donde las injusticias podían suceder, sin ser culpable... y donde también había familias maravillosas que estaban unidas y eran leales, que trabajaban, criaban a sus hijos como podían y con esta vida sencilla podían ser felices.
Qué voy a decir del plantel estupendo de secundarios... Todos me han encantado y los he querido enseguida, debido a su comportamiento cariñoso y ético. Yñigo me ha derretido el corazón, con su forma de ser; Mateo me ha hecho reír en varias ocasiones; Claudia, es un cielo de mujer, muy temperamental; El alcalde y su mujer, siempre apostando por Elisa; pero sobre todo, Nicolasa, la madre que lleva a su familia y el caserío con mucho amor y disciplina. Todos me han parecido un retrato fiel y correcto de esa época. Tengo que hacer una excepción, la madrastra de Elisa, ¡qué mujer más repulsiva y rastrera! Aunque también es un fiel reflejo de las de su clase.
Resumiendo un poco, en esta historia de gente sencilla y trabajadora he observado que el amor puede surgir de cualquier sitio y en cualquier lugar y, desde luego, cuando menos te lo esperas. Lo importante es ser buena persona, confiar en los tuyos y respetarlos, además de amar, sobre todo. Si la felicidad existe, esta es una buena manera de encontrarla.
Un libro muy recomendable.
La protagonista, Elisa, encuentra en Joseph y su acogedora familia un refugio en el que esperar su huida definitiva de España. Allí, por primera vez sentirá lo que es una familia que se ama y se respeta. Su choque es brutal al principio. No entiende las chanzas que se sueltan entre ellos y el cariño que sienten todos por todos. Ella ha vivido desde los seis años, cuando murió su madre, en una casa donde se ha abusado de ella, la han maltratado y la han odiado; por lo tanto, le cuesta habituarse a compartir ese buen ambiente que existe en la familia Arana. Van pasando las semanas y se va sintiendo parte de ellos, al mismo tiempo que se va enamorando de Joseph y de sus dos hijos.
Por otra parte, el protagonista, Joseph, aún siente la falta de su esposa y culpa al destino de su muerte, aunque empieza a sentirse atraído por la dulzura de Elisa, la cual se va ganando el corazón de todos, pero sobre todo de Yñigo, el pequeño hijo de Joseph. Se siente culpable por desear algo que no debería, pero la pasión es más fuerte que él.
Me ha encantado la relación amorosa. Un amor que empieza despacio, y con el paso del tiempo va creciendo y aumentado su poder. Las expresiones de ternura, el cariño que los envuelve, las chispas que saltan cuando están juntos, lo que tratan de evitar y no consiguen, los remordimientos y todo ese sufrimiento/felicidad que sienten los que se enamoran…
En cuanto a la ambientación, me ha parecido perfecta. Todas las descripciones que nos enseña cómo se vive en un caserío de los montes cercanos a San Sebastian, sus costumbres, sus hábitos, su forma de trabajar y sus momentos de ocio. Una época, donde los lutos eran eternos, se circulaba andando o a caballo, además ir en carro. Un tiempo donde las injusticias podían suceder, sin ser culpable... y donde también había familias maravillosas que estaban unidas y eran leales, que trabajaban, criaban a sus hijos como podían y con esta vida sencilla podían ser felices.
Qué voy a decir del plantel estupendo de secundarios... Todos me han encantado y los he querido enseguida, debido a su comportamiento cariñoso y ético. Yñigo me ha derretido el corazón, con su forma de ser; Mateo me ha hecho reír en varias ocasiones; Claudia, es un cielo de mujer, muy temperamental; El alcalde y su mujer, siempre apostando por Elisa; pero sobre todo, Nicolasa, la madre que lleva a su familia y el caserío con mucho amor y disciplina. Todos me han parecido un retrato fiel y correcto de esa época. Tengo que hacer una excepción, la madrastra de Elisa, ¡qué mujer más repulsiva y rastrera! Aunque también es un fiel reflejo de las de su clase.
Resumiendo un poco, en esta historia de gente sencilla y trabajadora he observado que el amor puede surgir de cualquier sitio y en cualquier lugar y, desde luego, cuando menos te lo esperas. Lo importante es ser buena persona, confiar en los tuyos y respetarlos, además de amar, sobre todo. Si la felicidad existe, esta es una buena manera de encontrarla.
Un libro muy recomendable.