La espera ha valido la pena , Dana Jordan con esta novela ha creado un perfecto broche de oro para esta serie de los hermanos Barrymore , que ojalá fueran unos pocos más.

Jocelyn es la menor de los hermanos Barrymore , ya vimos en el libro anterior como colgaba la toga porque quería escapar del control de toda su familia , quería demostrarles a todos que realmente es una mujer fuerte y sabe cuidarse sola , perfectamente.
Han pasado dos años desde que Jocelyn decidió marchar a Chicago y alejarse de los suyos y del hombre por el que su corazón late , Sergey Saenko , pero por fin ha encontrado algo con lo que ha recuperado la confianza en si misma, y con lo que disfruta, el diseño de joyas.

Sergey ha ido a Chicago para encargarse del caso de un asesino en serie que ha vuelto a actuar después de veinte años , allí se encuentra con Jocelyn , a la que siempre ha protegido, incluso en la distancia. Jocelyn se ha convertido en la testigo principal del psicópata y por ello está en el punto de mira del mismo , así que Sergey será el que la proteja mientras no atrapen al asesino.

El hecho de que Jocelyn y Sergey estén conviviendo , hace que aflore la atracción que siempre han sentido el uno por el otro , pero Sergey siempre se ha considerado inferior y no quiere perjudicar a Jocelyn , no obstante, la ayuda a encontrar el valor que siempre le ha hecho falta para enfrentarse a todo y a todos , un valor que aprovecha Jocelyn para declarar lo que siente por él e intentar que se quede a su lado , claro que para eso tendrán que encontrar primero al asesino que la acecha.


Como he dicho antes me ha parecido el broche final perfecto para esta serie , primero porque los protagonistas me han conquistado totalmente , Jocelyn ha evolucionado mucho desde que la vimos aparecer en el primer libro , de ser una mujer insegura y temerosa , se ha convertido en una luchadora nata , que hace frente a todos los inconvenientes y a todos los problemas , que apuesta fuerte para que su relación con Sergey llegue a buen fin , pero con la iglesia hemos topado , por que Sergey es bastante cabezón , está acostumbrado a una vida solitaria y oscura , porque sabe que su pasado es un lastre , además no se considera bueno para Jocelyn , aunque si para protegerla y amarla en la distancia , aunque , poco a poco, con el cariño y la paciencia de la joven , irá bajando la guardia.

Otra cosa que me ha encantado ha sido disfrutar de todos los Barrymore , cosa que eché en falta en el libro de Alex , me ha gustado mucho ver la armonía que hay entre ellos (exceptuando a la bruja de la madre) , como protegen a su hermana pequeña y la camaradería con la que tratan a Sergey .
Y si a eso , le añadimos la trama de intriga que te tiene en vilo desde que empieza el libro hasta que acaba , pues lo dicho , una historia que roza la perfección.

En definitiva , Ciega obsesión es el cierre perfecto para esta serie de los hermanos Barrymore, una historia que atrapa desde el principio tanto por su trama de misterio y suspense como por la bonita historia de amor que protagonizan Jocelyn y Sergey , unos personajes fuertes y bien definidos , que tienen que luchar contra un psicópata y contra sus propios demonios.

Mi valoración 4,5/5